Las calles del Centro Histórico pasarán a ser semipeatonales y se hará de forma gradual

El ayuntamiento prevé transformar gradualmente las calles de acceso al Barri Antic en semipeatonales, con aceras y calzada al mismo nivel y dando prioridad a peatones y ciclistas. Así lo avanzó a este diario el teniente de alcalde responsable de Urbanismo, Fèlix Larrosa, que precisó que todavía hay que determinar si se implantará una “zona 20”, con la velocidad de los vehículos limitada a 20 por hora, o bien será otra “zona 30” como las ya existentes en varias áreas de la ciudad. La idea del ayuntamiento es aprovechar las actuaciones urbanísticas que se vayan haciendo en el barrio para ir remodelando las calles. En este sentido, la nueva plaza de la Panera, cuyo proyecto fue elegido a través de un proceso participativo, comportará que un tramo de la calle Sant Martí pase a ser de plataforma única.

Asimismo, en los últimos años también se ha hecho lo propio en algún vial concreto del barrio, como el de Sant Crist entre la plaza Sant Josep y Rambla d’Aragó. Este también es el modelo que el ayuntamiento está aplicando en las calles ubicadas entre la Rambla Ferran y avenida del Segre.

Hace años, ya reformó Vila Antònia, Nord y Comerç, donde las aceras y la calzada pasaron a estar al mismo nivel, y ahora también lo extenderá al resto de vías de este barrio en las obras que actualmente están en ejecución. En esta zona, además, está previsto habilitar tres plazas cuyo pavimento estará a un nivel más elevado que el de las calles de acceso. Una será totalmente nueva, aprovechando el espacio existente en la confluencia de la calle General Brito con avenida del Segre, mientras que las otras dos plazas suponen la ampliación y mejora de la plaza Sanahuja, por un lado, y de la situada en la confluencia de las calles General Brito, Riu y Maria Sauret.

El ayuntamiento también ha iniciado los trámites para remodelar Rambla Ferran dando más espacio al paseo central y prolongarlo.

Dudas con el carril bici de avenida Catalunya por la falta de dinero El pleno municipal aprobó el pasado viernes la adjudicación de las obras del proyecto del carril bici de avenida Catalunya con muchas dudas por parte de los partidos de la oposición. El motivo de que el Comú, el PP, Crida-CUP, ERC y el PDeCAT no votaran a favor del plan era que el interventor municipal alertó que no había presupuesto municipal asignado para pagar la obra y los partidos dudaban de que el consistorio pudiera aportar ese dinero de forma inmediata, ya que las obras se harán este mes de agosto. El concejal de Urbanismo, Fèlix Larrosa, destacó que “es una inversión estudiada y los fondos para hacerla se podrían obtener de la venta de solares o recibir una subvención de algún fondo estatal o catalán. La obra fue adjudicada gracias a los votors del equipo de gobierno, Ciudadanos, que votó “por responsabilidad”, mientras el Comú votó en contra y el resto de formaciones se abstuvieron.