BARRIOS UNIVERSITAT
Los vecinos piden más control del centro de menores
En una tensa reunión con sus responsables, reclaman menos ruido y “más civismo” || Critican que no se les informara antes
Más de un centenar de vecinos de Universitat asistieron a la reunión en la sede vecinal.
La asociación del barrio Universitat celebró ayer una reunión informativa con los responsables del centro de menores migrantes, que ha comenzado a funcionar hace poco en la tercera y cuarta planta del edificio del Seminario, para escuchar las críticas y quejas de los vecinos con el fin de intentar solucionarlas y “poder convivir todos en paz”, dijo la directora del centro, Lídia Borrell. Algunos vecinos criticaban que los menores “están mucho tiempo en la calle, hacen mucho ruido y crean problemas de civismo”, además de pedir a los responsables del centro “un mayor control de los jóvenes cuando están fuera del edificio” y que instalen cortinas o vinilos en las ventanas de las habitaciones donde duermen. El presidente vecinal, Robert Setó, medió entre las dos partes y aseguró que “estableceremos una línea de comunicación con el centro para ir transmitiendo las quejas de los vecinos para que puedan solucionarlas lo antes posible”. Un grupo de vecinos también criticó que el ayuntamiento no les haya informado del traslado del centro al edificio del Seminario, que enviaron una carta a la concejalía de Urbanismo y al alcalde preguntando sobre el tema y que todavía no habían recibido respuesta.
