TRIBUNALES MEDIO AMBIENTE
El juez da la razón a la CHE y obliga a la Paeria a pagar la retirada de algas de la canalización
El consistorio encargó los trabajos de forma subsidiaria, que costaron 101.077 euros, y después envió la factura a la Confederación, que recurrió|| El Superior de Justicia de Catalunya ha estimado el recurso
El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) considera que la Confederación Hidrográfica del Ebro no debe pagar el coste de la retirada de algas del río Segre “al no ser la administración directamente responsable de la realización de labores de mantenimiento de cauces en tramos urbanos”, indicó ayer la propia CHE. El año pasado, la Paeria contrató la retirada de forma subsidiaria de los macrófitos (plantas acuáticas como las algas) del río a su paso por la capital y después notificó a la Confederación que debía pagar los 101.077 euros que costó el trabajo. Entonces, este organismo presentó un recurso contencioso administrativo al no estar de acuerdo con tener que afrontar este pago, que ahora ha sido estimado “en su totalidad” por el TSJC, según la CHE. En su recurso alegó que la limpieza de los cauces en tramos urbanos de ríos es competencia de los ayuntamientos y argumentó que así lo avalan dos leyes estatales. Al respecto, el alcalde, Fèlix Larrosa, se limió a afirmar que estudiarán la resolución judicial y valorarán qué decisión toman, puesto que el fallo se puede recurrir.
Este proceso judicial es fruto del desacuerdo entre el ayuntamiento de Lleida y la Confederación sobre qué administración debe pagar el servicio de retirada de las plantas acuáticas que ‘colonizaban’ el río a su paso por la ciudad y provocaban quejas vecinales, sobre todo de barrios próximos al Segre, por la proliferación de insectos. La Paeria defendió desde el primer momento que la limpieza del río es competencia del organismo de cuenca, mientras que la CHE siempre ha asegurado que le corresponde al consistorio. Ante esta situación, la Paeria optó por hacerse cargo de la eliminación de los macrófitos para luchar contra la proliferación de la mosca negra y le envió la factura a la Confederación para que se hiciera cargo de ella mediante un decreto de alcaldía. La CHE presentó un requerimiento para impugnar la decisión y ahora la justicia ha dictaminado que la Confederación no debe asumir los costes de la limpieza del río.
Las plantas acuáticas ayudan a la proliferación de la mosca negra y motivaron quejas vecinales
El consistorio contrató a la empresa Tot Servei de la Noguera para la retirada de las algas del tramo urbano del río desde Pardinyes a la zona de los institutos mediante una peculiar embarcación anfibia que corta las plantas y la corriente las arrastra hasta una retención formada por una cuerda y unas varillas, donde se acumulan, y una retroexcavadora y varios operarios las sacan del cauce. Después se acopian, se dejan secar y se llevan a un centro de compostaje, donde finalmente se reciclan como abono.