Bancos deben 13.400 € por el agua de pisos okupados en un bloque

Vecinos de un bloque de Gaspar de Portolà, en la Mariola, denuncian que los bancos propietarios de pisos okupados acumulan una deuda de 13.400 euros por el impago básicamente de facturas del agua, de gastos de la comunidad, de mantenimiento y del seguro desde el año pasado.

El edificio tiene 16 pisos, seis están okupados y en ocho viven sus propietarios, mientras que los demás están vacíos. Como el contador de agua es de la comunidad, la tienen que pagar entre todos, pero según denuncian algunos vecinos, “los propietarios de los pisos okupados, que son bancos, no quieren pagar las facturas del agua, de mantenimiento del edificio y del seguro”. En concreto, aseguraron que una entidad bancaria debe 3.400 euros; otra, 3.200; otra, 4.250; otra, 1.380 y una última, 1.130. Ante la deuda acumulada, los vecinos explicaron que la comunidad ha sido demandada por parte de la concesionaria Aqualia. “Hemos intentado muchas veces ponernos en contacto con los bancos para que liquiden la deuda pero no nos hacen caso”, manifestaron.

Los vecinos critican que los bancos se niegan a pagar la limpieza de los depósitos de agua comunitarios

Los vecinos también explicarcon que si el contador supera un consumo de 388 metros cúbicos cada dos meses se aplica una tarifa mucho mas cara que dispara la factura. “Siempre nos pasamos por culpa de los okupas, que hacen un gasto innecesario del agua”, denunciaron.

Asimismo, fuentes solventes indicaron que esta situación se repite en otros pisos okupados de la ciudad cuyos propietarios son entidades bancarias. La Paeria anunció el mes de pasado la creación de un fondo de 80.000 euros para evitar que comunidades de vecinos deban asumir facturas de agua impagadas de pisos okupados, aunque todavía no se ha puesto en marcha. El ayuntamiento aportará 30.000 euros y Aqualia, 50.000.

Pero la negativa de los bancos a pagar los gastos de comunidad no se enmarca solamente en las deudas con los proveedores, sinó que también pueden tener consecuencias para la salud de los vecinos. Un ejemplo de ello ocurre en los bloques Ramiro Ledesma, donde algunos vecinos han denunciado “que los depósitos de agua de la comunidad están llenos de palomas y ratas muertas.

El agua está contaminadísima y, como la mayoría de esas viviendas están okupadas y son propiedad de bancos, no quieren pagar para limpiarlo”, asegura un vecino, que dice que “ya no pago la cuota de comunidad. ¿Para qué? Si no tengo ni agua potable”, se queja.

Consultas a las entidades para redactar un plan de acción social

El ayuntamiento está llevando a cabo estas semanas una ronda de consultas con las distintas entidades y asociaciones de la Mariola para conocer “las carencias y las virtudes del barrio”. El objetivo es conocer la opinión directa de los residentes de la Mariola para llevar a cabo un plan de actuación a nivel social. Ayer, un grupo de trabajadoras de los servicios sociales de la Paeria se reunieron con miembros de la entidad Mariola en Moviment, que les transmitieron que, además del problema de la vivienda, el barrio necesita “formación para jóvenes, promover la creación de puestos de trabajo y mejorar las condiciones de higiene y salubridad ”, dijo un portavoz de la entidad. “Faltan educadores sociales en las calles, asistencia a gente mayor que vive sola y está desatendida, formar a los jóvenes en un trabajo e incentivar el emprendimiento y la riqueza cultural del barrio. Hay que abrir la Mariola a la ciudad” dijo el portavoz de Mariola en Moviment.