El comercio de barrio lanza un SOS

A excepción del Eix Comercial y de la avenida Prat de la Riba, Lleida sufre una sequía. Pero no de agua, sino de comercios abiertos, hecho que provoca que las asociaciones de comerciantes de varios barrios propongan medidas para cambiar esta tendencia y que las calles vuelvan a estar llenas de establecimientos. “Cada día nos encontramos con más tiendas que cierran y locales semiabandonados, la situación ha empeorado bastante”, reconoce la presidenta de los comerciantes de Cappont, Elia Jodar, que señala que la falta de relevo generacional y los altos precios para alquilar o adquirir locales son las principales causas de esta desertización comercial. “Se debería dar ayudas a jóvenes y a emprendedores para que puedan abrir tiendas en los barrios en vez de hacer centros comerciales”, señala Jodar.

Por su parte, el presidente comercial de Pardinyes, David Membrilla, afirma que el cierre de locales comerciales “es un problema que afecta a toda la ciudad. Son muchos los factores que han llevado a esta situación, pero el primordial diría que es el asunto económico”. Pone como ejemplo la cuota de autónomos. “Llevo 20 años trabajando y pagando una cuota que incluso ha subido en los últimos años, no es justo y se debería rebajar, porque tirar un negocio adelante con estos hándicaps es muy difícil. Estamos hablando de que hay negocios en el barrio que apenas tienen seis meses de vida y cierran, necesitamos ayudas o rebajas para solucionar esto”, recalca Membrilla. De la misma forma opina la presidenta de los comerciantes de la Bordeta, Paqui Tena, aunque precisa que el principal problema en su barrio es la falta de relevo generacional. “La mayoría de las tiendas que han cerrado es porque sus dueños se jubilan, deberían dar más oportunidades a los jóvenes que quieren abrir negocios, es necesario un relevo generacional ya”, destaca. “Un barrio sin comercio es un barrio muerto”, sentencia la presidenta de Balàfia, Meritxell Montagut, que señala que la falta de dinamizadores comerciales en los barrios ha agravado esta crisis. “Se deben hacer actividades para hacer más atractivo el comercio de barrio y animar a más gente, e incluso una ayuda de la Paeria para abrir negocios no estaría mal”, propone.

La desertización comercial de los barrios coincide con el aumento de locales en los polígonos industriales

El aumento de los precios de los locales comerciales ha provocado, además de la desertización de los barrios, que muchos opten por irse a los polígonos. “Son más baratos, están bien comunicados y es una tendencia al alza por parte de pequeños comerciantes, es evidente que están abandonando los barrios por los altos precios”, señala Sergi Ortega, de Finques Farré.

Menos afluencia desde el traslado de la oficina del DNI Los establecimientos de la calle Jaume II, en Cappont, han perdido parte de su clientela desde que en noviembre del año pasado se trasladó la oficina de expedición del DNI que estaba en esta calle a la comisaría de Prat de la Riba. “Ahora solo pasan por la zona los vecinos, por lo que a los comerciantes les preocupa que haya disminuido la presencia de peatones desde el traslado de la oficina”, manifestó ayer la presidenta de la asociación de vecinos de Cappont, Veni Ros. Al respecto, explicó que desde la asociación organizarán actividades para dinamizar esa zona “y hacer que venga más gente de fuera”. De hecho, el próximo 27 de octubre llevarán a cabo una castanyada y un desfile de moda. El traslado de la oficina del DNI a la comisaría central de la Policía Nacional, ubicada en el antiguo Gobierno Militar, se llevó a cabo a finales del pasado mes de noviembre tras nueve años en Cappont. El Gobierno central aseguró que a nivel operativo, al centralizar las oficinas, la eficacia y rapidez en la resolución de determinados problemas que pueden surgir en la expedición de documentos es ahora mayor.