¿Agua gratis en bares y restaurantes?

Un simple gesto como pedir un vaso de agua del grifo en un bar o restaurante se ha convertido en una cuestión de debate entre los camareros y restauradores de la provincia. El motivo es que la Organización de Consumidores (OCU) inició el pasado septiembre una campaña para pedir que “los establecimientos de hostelería ofrezcan un recipiente con agua del grifo y vasos para su consumo de manera gratuita”, alegando que es un bien básico, es más económico que el agua embotellada y es saludable. La iniciativa acumula ya más de 2.800 firmas, hecho que ha motivado a la Federación de Hostelería de Lleida a preguntar a sus asociados sobre esta posibilidad y si lo consideran más “un detalle o una obligación”. Por el momento la opinión del sector es contundente, ya que el 76% de las personas que han votado lo consideran un detalle, mientras que el 24% lo ven como algo obligatorio.

“No es un tema que ahora mismo esté a debate en Lleida ni que sea determinante para el sector, pero queríamos conocer la opinión de nuestros asociados al respecto”, explicó Ramón Solsona, gerente de la federación de Hostelería. “Salvo excepciones, no suele ser un punto de conflicto y si alguien pide un vaso de agua, se le da”. Aún con todo, Solsona no descarta “que en un futuro las administraciones lo impongan como algo obligatorio, ya que en algunos países lo es y no nos sorprendería que quisieran adoptar esta medida aquí”, advierte. En este sentido, la Generalitat aseguró el pasado agosto que no contempla promover una norma que obligue a servir agua de forma obligatoria en bares y restaurantes después de que Aigües de Barcelona y la Associació de Restauració Sostenible propusieran servir agua del grifo filtrada de forma gratuita. “No tenemos previsto hacer una ley más allá de poder legislar para poder garantizar que el agua tiene una calidad adecuada para ser consumida”, aseguró el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet. Sin embargo, los gobiernos de otras comunidades autónomas como Andalucía, Baleares y Navarra han impulsado iniciativas legislativas para que sí sea obligatorio. En cuanto a la opinión de los hosteleros leridanos, muchos creen que es similar a pedir usar el lavabo del establecimiento sin consumir. “Por una vez no pasa nada y no supone ningún problema servirles un vaso de agua si es para tomarse una aspirina, pero tampoco creo que hacerlo obligatorio nos beneficie porque hay mucho espabilado, además de que hay fuentes públicas”, dijo Maria Jesús, que regenta un restaurante en la calle Magdalena.