SUCESOS VIOLENCIA FAMILIAR
La Urbana detiene a un joven por pegar a su madre en la calle del Nord
La víctima pidió auxilio a los vecinos, que llamaron a la policía || Los agentes entraron por la galería al no abrirles el sospechoso, sorprendido ‘in fraganti’
La Guardia Urbana detuvo ayer por la tarde a un joven de 19 años acusado de pegar a su madre, de 51 años, cuando ambos se encontraban en el domicilio familiar, situado en un primer piso del número 19 de la calle del Nord, en el barrio de Noguerola. El sospechoso fue arrestado como supuesto autor de un delito de violencia en el ámbito familiar, según confirmaron desde la Urbana.
El suceso tuvo lugar minutos antes de las seis de la tarde. Los vecinos llamaron a la policía después de que escucharan a la mujer gritando socorro. Los agentes tuvieron que acceder a la vivienda por la galería ya que nadie les abría la puerta. En el interior sorprendieron in fraganti al joven pegando a su madre, según fuentes cercanas al caso. La Urbana desplazó a la zona tres patrullas y también acudió una ambulancia del Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM). Por causas desconocidas, el joven agredió supuestamente a su madre y se autolesionó en una mano. Los sanitarios atendieron en el domicilio tanto a la madre como a su hijo. Ninguno de ellos precisó de traslado a un centro médico. Sobre las 18.15 horas, una patrulla se llevó al detenido hacia el cuartel. Durante la intervención, la Guardia Urbana cortó la circulación en un tramo de esta calle del barrio de Noguerola.
La mujer y su hijo, que se autolesionó, fueron atendidos por los sanitarios en el mismo domicilio
Las denuncias por violencia familiar aumentaron en el último año en Lleida. En 2017 se registraron un total de 434 delitos, aumentando las agresiones de hijos a padres. Concretamente, según la Memoria de la Fiscalía de Lleida, hubo 62 investigados, un 7% más que en 2016. En cuanto a los adolescentes, un total de 16 menores fueron imputados por maltrato, una violencia ejercida contra padres y hermanos, en la mayoría de los casos. En muchos de los casos, los agresores son varones y los padres no denuncian hasta que la situación es insostenible.