Piden prisión para un acusado de agredir a su hermana de 60 años

La Fiscalía solicitó ayer una condena de un año de prisión para un leridano acusado de agredir a su hermana de unos 60 años, a la que habría propinado varios puñetazos, uno de ellos en el ojo derecho, lo que le causó un desprendimiento de retina y pérdida de visión. En un juicio que se celebró en el juzgado de lo Penal número 3 de Lleida, el Ministerio Público también reclamó que el hombre indemnice a la mujer con más de 10.000 euros. La acusación particular elevó la petición a dos años de cárcel y al pago de una indemnización de 15.600 euros por los cerca de cuatro meses que estuvo de baja. La mujer herida y su hijo también están acusados de sendos delitos leves ya que el hermano y tío, respectivamente, también les denunció.

Los hechos tuvieron lugar el 30 de septiembre del año 2016 en el domicilio de la madre de ambos, que por aquel entonces tenía 84 años, y en el que también residían el acusado y la pareja de este. La hermana explicó que acudió al domicilio porque la situación era insostenible porque tanto su hermano como su pareja trataban de manera denigrante a su madre. “Cogí del brazo a su mujer y le dije: ‘¡a la puta calle! Mi hermano, que estaba tumbado en la cama, se abalanzó sobre mí y me arreó dos puñetazos, uno de ellos en un ojo”. La forense explicó que la afectada sufrió un desprendimiento de retina y acabó perdiendo parte de la visión. En la disputa también participó el hijo de la mujer y sobrino del hombre. “Le pegué pero para defender a mi madre”, dijo este. Una versión diferente a la que ofreció el principal acusado, que dijo que “la persona atacada fui yo, me defendí como pude”. La Fiscalía acusa al hermano de un delito de lesiones por la agresión a la mujer y de un delito leve de lesiones por los golpes que propinó a su sobrino, mientras que acusa a la mujer y a su hijo de sendos delitos leves de lesiones que, en el caso de ser condenados, les supondría el pago de una multa.

Aumentan un 7% los casos de violencia familiar en Lleida Las denuncias por violencia familiar aumentaron en el último año en Lleida. En 2017 se registraron un total de 434 delitos, aumentando las agresiones de hijos a padres. Concretamente, según la Memoria del Ministerio Público, hubo 62 investigados, un 7% más que en 2016. En cuanto a los adolescentes, un total de 16 menores fueron imputados por maltrato, una violencia ejercida contra padres y hermanos, en la mayoría de los casos. En muchos casos, los agresores son varones y los padres no denuncian hasta que la situación es insostenible. Asimismo, también se registra un incremento alarmante de casos en los que las víctimas son abuelos. En las comarcas de Ponent, el año pasado se investigaron 24 casos de leridanos agredidos por sus nietos, ocho más que un año antes.