Manifestación el 16 y caceroladas en colegios en contra de 'privatizar' el comedor escolar

Miembros de Ampas de varios colegios y representantes de la comunidad educativa de Lleida acordaron ayer un programa de movilizaciones contra el decreto de la Generalitat que apuesta por que todos los comedores escolares estén en manos de los consells comarcals, impidiendo su gestión por parte de las Ampas. Entre otras medidas, han convocado una manifestación para el próximo día 16 de noviembre ante los servicios territoriales de Enseñanza, organizarán varias caceroladas en las escuelas y presentarán una moción en el pleno de la Paeria y del consell comarcal del Segrià.

“Cada vez está más claro de que el decreto se aprobará y no nos vamos a quedar de brazos cruzados”, informaron asistentes a la reunión. Explicaron que las Ampas denuncian que este decreto no se ha hecho con consenso, “por lo que queremos abrir un proceso de diálogo con el departamento de Enseñanza para llegar a una solución”.

La semana que viene, de lunes a viernes, los colegios harán caceroladas para mostrar su rechazo

En el encuentro, estuvieron presentes Ampas afectadas, la Fapac, Marea Groga de Lleida, un colectivo de monitores de comedor y otro de pequeñas empresas, que consensuaron un calendario de acciones.

Todos los días de la semana que viene, varios colegios de la provincia llevarán a cabo una cacerolada a la hora de la salida de las clases y el viernes día 16 habrá una concentración en la delegación de Enseñanza a las 18.00 horas.

El 20 de noviembre, día de los derechos de los niños, organizarán una jornada de duelo en los colegios, donde tanto alumnos como profesores y padres irán vestidos de negro “por el recorte de derechos que supone el decreto”, explicaron. El día 30, defenderán la moción en el pleno de la Paeria y, por último, el 5 de diciembre, día internacional del voluntariado, publicarán en las redes sociales fotografías del trabajo que hacen las Ampas en las escuelas.

En la reunión, “se constató que la preocupación no es solamente de las Ampas, sino que se ha extendido a monitores, pequeñas empresas que trabajan en comedores y a otras que se dedican al ocio por el cambio educativo que puede suponer que una gran empresa se haga cargo de los comedores”, apuntaron asistentes. Y es que consideraron que “al privatizar el sector, se perderá calidad en la educación, ya que no es solamente dar de comer, también se educa”, sentenciaron.

Casi 2.400 firmas para que la Escola Alba sea instituto

La asociación de madres, padres y alumnos (Ampa) de la Escola Alba entregó el pasado miércoles 2.380 firmas a los servicios territoriales de Enseñanza para que también sea un instituto para el curso 2019/2020 a través de un concierto.

Las Ampas del Alba y de los colegios de Corbins, Torrelameu y Vilanova de la Barca consideran que de esta forma se atenderían las necesidades de los alumnos de estos pueblos y de los que viven en las cercanías, en los cuales no hay ningún instituto.

De hecho, los ayuntamientos de Torrelameu y Corbins apoyan esta iniciativa, al igual que el 90% de los padres de la Escola Alba, según su Ampa.

El presidente de la entidad, Xavier Gaya, afirmó que el colegio “tiene la dimensión para que haya dos líneas de Secundaria y para que el curso que viene empiece con primero de Secundaria, aunque a la larga se tendrían que construir más aulas para dar cabida a todos los cursos”. Las Ampas de estos colegios creen que “es un agravio comparativo el hecho de que la escuela concertada ofrezca de manera general continuidad entre Primaria y Secundaria”. Afirman que “la ley educativa catalana recoge explícitamente la voluntad de promover escuelas-instituto y que el mismo conseller de Enseñanza, Josep Bargalló, ha expresado en varias ocasiones su intención de promoverlas durante su mandato”. En cuanto al apoyo de la dirección del centro a esta propuesta, Gaya entiende que “es competencia de Enseñanza y desde la dirección se mantienen al margen. A pesar de todo, muchos profesores de la escuela tienen matriculados a sus hijos aquí y ellos ven la medida con buenos ojos, tanto por necesidad como por comodidad”, afirmó.

Por su parte, el delegado de Enseñanza en Lleida, Carles Vega, afirmó ayer que el departamento está estudiando la propuesta. “El departamento está trabajando en estos momentos en la planificación de las necesidades de la ciudad de cara a un futuro, ya que hay que tener preparadas las estructuras educativas en función de la necesidad”, manifestó. Aseguró que a finales de mes “podremos pronunciarnos”, aunque Gaya confía en que tengan una respuesta en una reunión programada con Vega para el próximo día 15.

El delegado apuntó también que hay que estudiar la demanda de hace años de un instituto en el barrio de Cappont y aseguró que todo depende de un diagnóstico a medio y largo plazo para ver las necesidades futuras.