Denuncian que 2 residencias públicas de Lleida sirven comida de mala calidad

El sindicato CCOO denunció ayer que la comida que se sirve a los ancianos ingresados en las dos residencia públicas de Balàfia es de mala calidad e incluye platos que no deberían servirse a mayores dependientes, como pescado lleno de espinas. Asimismo, afirma que las condiciones laborales del personal encargado de atender a los más de 200 usuarios (93 fijos en Balàfia I en la calle Olondriz Ostiz y 60 fijos y 60 de centro de día en la II en la calle Vic) son deficientes a nivel salarial y de dotación de plantilla.

Sobre la comida, destaca que también ha generado quejas de los propios residentes y de familiares, lo que este diario pudo corroborar. Señala que, a pesar de que Balàfia I cuenta con una gran cocina, desde hace un tiempo el servicio lo presta una empresa externa de cátering, por lo que la comida es de línea fría. Se prepara en una cocina, se conserva refrigerada y se calienta antes de servirla. Además del pescado con espinas, el sindicato aportó ayer fotos de plástico encontrado en un plato, una naranja podrida por dentro, una tortilla más que dura, jamón serrano ennegrecido y varias de raciones que aparentemente son muy insuficientes aunque sean para ancianos.

El gerente de Gestió de Serveis Sanitaris (GSS), empresa pública que gestiona ambas residencias, Jordi Cortada, admitió que recibieron quejas sobre la comida que eran “absolutamente razonables”. No obstante, destacó que esto sucedió “hace tiempo” y que desde hace unos dos meses “la comida ha mejorado muchísimo”, por lo que aseguró que las actuales quejas de CCOO son infundadas. Cortada subrayó que la comida de línea fría puede ser de tan buena calidad como la que más. En este sentido, manifestó que su calidad ha mejorado debido al control ejercido por GSS, que llevó a la empresa contratada a mejorar la formación y también a hacer cambios en la plantilla. “El servicio de comida ahora funciona bien”, insistió. En cambio, CCOO lo niega.

Por otra parte, y sobre las quejas a nivel laboral (ver desglose), Cortada admitió que los salarios son bajos, pero que vienen fijados por el convenio del sector. Es más, subrayó que “nosotros pagamos por encima del convenio”. Sobre la dotación del personal, dijo que también está regulada por las ratios que marca el departamento de Bienestar, pero igualmente indicó que “estamos por encima de ellas”. En este sentido, abogó por plantear una mejora progresiva de las condiciones, y dijo que no puede hacerse de golpe porque el presupuesto no lo permite.

Un sector donde abundan los bajos sueldos y la falta de personal La responsable del sector de la geriatría de CCOO de Lleida, Helena Motos, señaló que este “es un sector precarizado”. De media, el personal, mayoritariamente mujeres, cobra unos 780 euros al mes a jornada completa y 500 a tiempo parcial. “Nadie valora lo que hacen los auxiliares. Es un trabajo muy duro, ya que implica esfuerzo físico y te afecta emocionalmente”, indicó. Además, dijo que en las residencias públicas de Balàfia “el abuso del contrato parcial y la frecuencia de rotaciones de empleados es altísimo”. Explicó que, “por la noche hay cuatro personas dando de cenar y acostando a 32 usuarios, por lo que tienen once minutos para cada uno”. Familiares dijeron que por norma debería haber un empleado por cada 10 usuarios y que no se cumple.