Mujeres activistas, sociales y políticas, para sustituir los nombres franquistas de las calles

El ayuntamiento anunció ayer los nombres que sustituirán los de las calles Alcalde Areny, Alcalde Recasens, Germans Recasens y Sangenis Beltran por la vinculación de estas personas con el régimen franquista y el alzamiento militar que provocó la Guerra Civil en 1936. Las nuevas denominaciones serán Joana Raspall, poeta, escritora y activista cultural catalana, para la avenida de l’Alcalde Areny, Germanes Mirabal, tres activistas dominicanas asesinadas por el régimen militar de Leónidas Trujillo y que se han convertido en un símbolo contra la violencia de género, por Germans Recasens. Rosa Parks, una de las principales activistas en la lucha por los derechos civiles y por la igualdad racial en los Estados Unidos en los años 60 u 70, será el nuevo nombre de la avenida Alcalde Recasens y el de enfermera y activista social y feminista vecina de La Bordeta y la única leridana de la lista, Dolors “Lolín” Sabaté, será la nueva denominación de la calle Sangenis Beltran.

La Paeria alegó que el cambio se hará la semana que viene a través de un decreto y que la selección de estos nuevos nombres es para cumplir el compromiso que hizo el alcalde Fèlix Larrosa de “paliar el desequilibrio que presenta el nomenclátor, que tradicionalmente no ha valorado justamente las aportaciones a la sociedad que han hecho las mujeres”. Este cambio de nombres viene después de que Larrosa decidiera sustituir el nombre de estas cuatro calles por su vinculación al franquismo pero no modificara el nombre de otras cinco con nombres vinculados de forma directa o indirecta con el régimen alegando que los nombres los escogieron ayuntamientos democráticos. La Paeria asumirá los costes del cambio de nombre y enviará una carta informativa a los vecinos de las calles afectadas.

Una enfermera de La Bordeta, la única leridana Dolors “Lolín” Sabaté es la única leridana de los nuevos nombres que ha anunciado la Paeria. Vecina de La Bordeta, fue enfermera y activista social feminista dentro de su compromiso como creyente católica. Impulsó en Lleida la Hermandad Obrera de Acción Católica y luchó por las mejoras laborales y la profesionalización del sector sanitario del Arnau de Vilanova.