El sector inmobiliario critica que el nuevo POUM frena promociones

El hecho de que el nuevo Plan de Ordenación Urbanística Municipal (POUM) lleve más de dos años tramitándose ha llevado al colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) y a la asociación de promotores a criticar que el nuevo ordenamiento “ha puesto en stand by todas las licencias que estaban en trámite en toda la ciudad”. La presidenta de los promotores, Pilar Pallàs, señaló que “es algo insólito, ya que en anteriores planes solo se paralizaban las promociones que se hacen en las zonas de expansión y este factor comporta que ahora se deban tramitar las nuevas promociones con el antiguo y el nuevo POUM, lo que genera inseguridad entre los promotores”. Aún con todo, Pallàs señala que “el ayuntamiento todavía no ha respondido las alegaciones que se han presentado al nuevo POUM, por lo que entiendo que muchos inversores esperan la respuesta de la Paeria antes de empezar nada”. Por su parte, el presidente del colegio de los API, Josep Maria Esteve, lamenta que, aparte de presentar el doble de documentación para empezar un nuevo proyecto, “la mayor diferencia entre el antiguo POUM y el nuevo es que los promotores pierden aproximadamente un 25% de edificabilidad, lo que para el propietario comporta una pérdida de su valor patrimonial y, por otro lado, al promotor le provoca la imposibilidad de tirar adelante el proyecto porque no es viable económicamente y se tiene que ajustar un nuevo precio, lo que provoca a veces que opte por cancelarlo”. Esteve aseguró que esto ha afectado a “decenas de promociones de obra nueva” y que afecta principalmente a los barrios del Eixample, donde se ha recortado la altura edificable (en toda la ciudad afecta a a 2.890 parcelas). Esteve recordó que la limitación de densidad del nuevo POUM en el Centro Histórico también ha provocado la paralización o suspensión de varias promocines “y esto para la ciudad es nefasto”, concluye.