Los peritos avalan a la joven que denunció una violación en grupo

La mujer que denunció a tres jóvenes por una violación sexual múltiple, en un caso que guarda ciertas similitudes con el de La Manada, reiteró ayer en el juicio que se celebró contra dos de ellos en la Audiencia de Lleida que la forzaron para tener sexo. La denunciante, de 28 años y que padece una discapacidad intelectual, aseguró ante el tribunal que les suplicó varias veces que pararan. “Dejadme en paz, por favor, me estáis haciendo daño”, declaró. Una versión que avalaron los peritos. La psicóloga que la atendió afirmó que “es incapaz de mantener una mentira en el tiempo, no fabula, es vulnerable y fácilmente manipulable”. Los forenses añadieron que es una persona con inteligencia límite.

Los acusados, en cambio, ofrecieron una versión totalmente opuesta. Uno de ellos afirmó que las relaciones fueron consentidas, mientras que el otro explicó que solo hizo una foto. Ambos añadieron que no detectaron que la mujer era discapacitada. Los hechos tuvieron lugar la madrugada del 22 de mayo de 2017 en el piso del tercer implicado, un joven que entonces tenía 16 años y que ya ha sido condenado por el juzgado de Menores de Lleida (ver desglose). La denunciante, que tiene una discapacidad intelectual del 69% y está incapacitada judicialmente, también relató que, tras irse del domicilio, “le expliqué a mi madre que me habían violado y nos fuimos al Arnau”. La Fiscalía solicitó para los dos acusados sendas condenas de 7 años de prisión como autores de un delito de abusos sexuales y no de agresión sexual al considerar que pese, a que hubo penetración, no se produjo bajo violencia ni intimidación.

El fiscal mantuvo que se ha demostrado que “la víctima no dio su consentimiento y eran conscientes de que se opuso”. Determinar si se ha probado o no que hubo falta de consentimiento será clave para dictar una sentencia condenatoria o absolutoria. La defensa mantuvo que las relaciones fueron consentidas y que la denunciante ha caído en numerosas contradicciones.

Un tercer acusado, que es menor, ya fue condenado a libertad vigilada Un tercer implicado en los hechos fue condenado hace unos meses por el juzgado de Menores de Lleida porque cuando tuvieron lugar los hechos tenía 16 años. El joven aceptó una condena de 20 meses de libertad vigilada dividida en dos partes: 15 meses de internamiento semiabierto y otros cinco meses de libertad vigilada. Asimismo, también se le impuso una orden de alejamiento de 200 metros y prohibición de comunicarse con la víctima durante el mismo periodo y el pago de una indemnización a la mujer de 6.000 euros. La sentencia es firme. Los dos hombres juzgados ayer están en libertad provisional y estuvieron encarcelados preventivamente durante medio año tras ser detenidos por los Mossos. Salieron de prisión al considerar el juez que no había riesgo de fuga.