Los delitos aumentan un 15,5% en un año en Lleida ciudad con más robos en vehículos

El aumento de la pequeña delincuencia, como el robo con fuerza en interior de vehículos, hizo que el balance de seguridad cerrara el año pasado en números rojos en la ciudad de Lleida con un 15,5% más de delitos que en 2017. Esta fue de una de las conclusiones de la Junta Local de Seguridad que se reunió ayer en la Paeria con representantes institucionales, de los diferentes cuerpos policiales y de la judicatura. Tras finalizar la reunión, el alcalde de Lleida, Fèlix Larrosa, destacó que este aumento de los cargos (con un total de 11.128 hechos delictivos el año pasado) se debe principalmente a los delitos contra el patrimonio, con un aumento que preocupa en el caso de los robos con fuerza en el interior de vehículos, con un total de 1.355 denuncias. Para combatirlo, Larrosa señaló que se apuesta por la prevención y la sensibilización de la ciudadanía, para que no dejen objetos de valor a la vista en sus vehículos, y también por modificar el Código Penal para combatir la reincidencia. “Entre la ciudadanía hay una sensación de impunidad en este tipo de delitos”, señaló. También aumentaron el año pasado los robos con fuerza en domicilios, un 48% más, hasta un total de 359. El alcalde también afirmó que es necesario trabajar para aumentar la percepción de seguridad y destacó el descenso del número de heridos graves por accidentes de tráfico, con un total de 20 en 2018, la cifra más baja de la serie histórica. La Junta también trató la proliferación de los delitos a través de internet, como el acoso o las estafas. Asimismo, resaltó el incremento de las peticiones de asilo, que pasan de 90 a 177 en un año, sobre todo de ciudadanos de Venezuela, Colombia y Ucrania. Por su parte, el delegado del Govern en Lleida, Ramon Farré, destacó que las actuaciones de los Mossos a causa del contexto político y social en Catalunya, se duplicaron el año pasado al pasar de 676 a 1.580.

Larrosa tratará con el conseller la falta de mossos y bomberos El alcalde de Lleida aprovechó la presencia del delegado del Govern para pedirle una reunión con el conseller de Interior, Miquel Buch, para tratar la falta de dotaciones y recursos de Mossos y Bomberos en la ciudad, algo, señaló, que le preocupa. Asimismo, señaló que esta petición ya la hizo llegar al conseller pero que, de momento, no ha obtenido respuesta. Según Ramon Farré, la Generalitat es consciente de la necesidad de incrementar la dotación policial y recordó que se han convocado 750 nuevas plazas en Mossos, que serán efectivos en 2 años. Un incremento que ayudará a aliviar el “estrés” añadido que tienen actualmente los efectivos de la Policía catalana, con más intervenciones por el contexto político y social, además de las actuaciones por el nivel 4 antiterrorista. Un “plus” de trabajo que, según Farré, no merma la eficacia policial.