Quinientos bomberos de toda Catalunya llevan su protesta a las calles de Lleida

Medio millar de bomberos llegados de parques de toda Catalunya se manifestaron ayer en Lleida para denunciar nuevamente la falta de personal y medios. Unas protestas que arrancaron el 10 de diciembre con la medida de no hacer horas extra voluntarias. Afirman que en estos tres meses de movilizaciones no se ha planteado ninguna solución.

Vestidos con las chaquetas de sus trajes ignífugos y los cascos puestos, unos 500 bomberos llegados de los parques de toda Catalunya se manifestaron ayer por las calles de la ciudad de Lleida para denunciar que necesitan con urgencia más personal y más medios. Convocados por los sindicatos y en la primera manifestación general del cuerpo fuera de la ciudad de Barcelona, la marcha salió sobre las 11.00 horas del parque de la ciudad en un recorrido que se alargó durante tres horas y que pasó por Onze de Setembre, Rovira Roure, Rambla d’Aragó, avenida Catalunya y Eix Comercial para finalizar en la plaza Paeria, donde se leyó un manifiesto conjunto en el que, entre otras reclamaciones, pidieron a la Generalitat que “se dote de recursos al cuerpo de Bomberos para dar un servicio esencial público y de calidad”.

La protesta forma parte de las movilizaciones que están llevando a cabo los funcionarios desde el pasado 10 de diciembre. La medida más llamativa ha sido dejar de hacer horas extra voluntarias lo que ha provocado que Interior haya reducido a la mitad el mínimo de efectivos por turno, de 46 a 23 personas en el caso de la región de Emergencias de Lleida. Joan Biescas, de CCOO, alertó de que el cuerpo “es un caos y está en caída libre”. Por su parte, Joan Carles Cerdán, de Catac, aseguró que “el plan estratégico que nos ha presentado Interior es una desgracia”. Cerdán añadió que “es inviable que haya parques con tres bomberos por turno, tendrían que ser el doble para garantizar su seguridad y la de los ciudadanos”. Por su parte, Alfons Tormo, de CSC CSC, añadió que “en el caso de las comarcas de Lleida, quedan zonas desprotegidas como Les Garrigues, única que no cuenta con un parque de funcionarios”. La manifestación contó con la participación de bomberos voluntarios. Josep Maria Alcalà, presidente de Asbovoca, dijo que “la falta de personal hace que se llegue tarde a las emergencias.

Los representantes sindicales se reunieron con el delegado del Govern, Ramon Farré. Ante la delegación de la Generalitat hicieron una hoguera con material obsoleto. También se entrevistaron con el alcalde de Lleida, Fèlix Larrosa.

“Vamos con miedo ante emergencias simultáneas” Miquel Martínez, sargento y jefe de turno del parque de Lleida, explicó que “la pérdida de personal hace que tengamos que adaptar las salidas, con menos efectivos de lo que queremos”. El mayor temor que tienen es la simultaneidad de servicios, es decir, emergencias que se producen en el mismo intervalo de tiempo. “Nuestro parque es el de referencia del Segrià, desde Seròs hasta Almenar. Por ejemplo, en cualquier incendio de vivienda tenemos que salir todos los efectivos, dejando el parque sin capacidad para atender un segundo servicio, por lo que la ciudad queda desprotegida”.