SANIDAD EQUIPAMIENTOS
El CAP Onze de Setembre estrena al fin las primeras piscinas públicas para rehabilitación
Pacientes que han sufrido fracturas en piernas o brazos, primeros usuarios de un servicio que la sanidad pública solo ofrecía hasta ahora en Bellvitge || El agua facilita la recuperación y que haya menos dolor
A la izquierda, pacientes haciendo ayer ejercicios de rehabilitación y, a la derecha, una grúa que permitirá ayudar a usuarios a entrar en la piscina.
El servicio de rehabilitación con hidroterapia en dos piscinas en el CAP Onze de Setembre se puso ayer en marcha, después de dos años y medio en espera, y de momento lo han estrenado pacientes que se recuperan de fracturas en brazos o piernas. Más adelante, también las usarán afectados por problemas neurológicos (como por ejemplo un ictus, lesiones medulares o esclerosis múltiple) y con parálisis cerebral.
El director médico del servicio de rehabilitación, Luis Mambrona, explicó que las posibilidades que ofrece el agua “permiten empezar y terminar antes la rehabilitación y que no provoque dolor, gracias a que la temperatura caliente aporta elasticidad, da una sensación de masaje y permite que el cuerpo flote, por lo que se puede trabajar con ejercicios que en tierra son más complicados por el peso y la gravedad”.
Destinado a afectados neurológicos, con parálisis cerebral o fracturas en el aparato locomotor
Una de las usuarias que estrenó la piscina, Montse, que tiene que reforzar los tendones de un brazo, valoró positivamente la experiencia. “Estamos muy contentos, ya que realmente no notas tanto dolor”, manifestó, y agradeció “que en Lleida podamos tener este servicio”. Por su parte, la supervisora de rehabilitación, Dunia Codina, dijo que la respuesta de los pacientes ha sido muy buena, “aunque algunos han dicho que no por miedo, pero todo es acostumbrarse”.
El servicio funcionará tres horas diarias con 20 sesiones, en las que pueden participar entre una y ocho personas. Actualmente hay dos fisioterapeutas que han recibido formación y más adelante, cuando se amplíe el servicio, habrá dos más.
Las piscinas están disponibles desde que se inauguró el CAP en septiembre de 2016, pero no han entrado en funcionamiento hasta tener el presupuesto, el plan de mantenimiento y la formación del personal. Solo el hospital de Bellvitge ofrece desde hace 20 años este servicio en la sanidad pública catalana. Mambrona señaló que “tanto en España como en Catalunya no se ha potenciado la hidroterapia” y que “es más común en Francia y Holanda”.
A la izquierda, pacientes haciendo ayer ejercicios de rehabilitación y, a la derecha, una grúa que permitirá ayudar a usuarios a entrar en la piscina.
