REPORTAJE PATRIMONIO
Descubriendo el Molí de Cervià
Ubicado en la partida de Grenyana junto a la Mitjana, es uno de los elementos históricos más desconocidos de Lleida || Su origen data del siglo XII, fue un complejo industrial medieval que, entre otros usos, fue harinero hasta principios del XX y que ahora la Paeria promocionará
Se llama Molí de Cervià, está ubicado en la margen izquierda del río Segre, en la partida de Grenyana y junto al parque de la Mitjana y es uno de los elementos históricos de la ciudad más desconocido por los leridanos, junto al Molí de La Bordeta. Su origen se remonta al siglo XII y estuvo en funcionamiento hasta el primer tercio del XX y desde entonces, ha estado abandonado y ahora, en un penoso estado ruinoso. Sin embargo, recientemente ha pasado a propiedad municipal y la Paeria lo rehabilitará e impulsará para que forme parte del Museu de l’Aigua.
Una de las personas que ha trabajado para recopilar la historia del Molí, el gestor cultural Xavier Esterri, explica que su origen va ligado a la creación de la acequia de Fontanet, en época sarracena. “Estas dos obras se pueden vincular a la gran expansión urbana que se produjo en Lleida durante el siglo X. Tras la reconquista cristiana de la ciudad al 1149, se produce un proceso de reparto territorial y el molino fue dado a un repoblador procedente de la vila garriguense de Cervià, Ramon de Cervià, de ahí su nombre”, relata Esterri. El historiador Xavier Eritja explica que fue un complejo industrial dividido en dos partes, el molino de arriba, que funcionaba para batir la lana y fabricar barnices, además de otros usos, y el molino de abajo, que hacía de harinero y fabricó electricidad. “Junto al molino de La Bordeta, es uno de los equipamientos industriales más importantes”, afirma.
Hoy a las 18.00 horas, los vecinos de Grenyana organizan un acto en el Molí para reivindicarlo
Pasada la guerra de Els Segadors, en 1665, el consejo de la Paeria (propietario del molino tras la extinción del linaje de los Cervià) lo restaura y lo amplía hasta lo que tenemos hoy en día. Estuvo en activo hasta la primera mitad del XX, cuando quedó abandonado y solo en la memoria de los vecinos de Grenyana, que durante años no han parado de luchar para recuperarlo. “Gracias a Fèlix Larrosa, cuando aún no era alcalde, el consistorio se interesó”, afirma la presidenta vecinal, Dolors Comes, quien recuerda que hoy a las 18.00 horas organizan un acto para darlo a conocer.
“Las escuelas deben hacer visitas educativas para darlo a conocer”
La asociación de vecinos de la partida de Grenyana, lugar donde se encuentra el Molí de Cervià, lo tiene muy claro: “Los colegios deberían hacer visitas educativas para que aprendan su historia, ya que sería la mejor iniciativa para que la ciudadanía sepa de su existencia”. Así lo manifestó la presidenta vecinal, Dolors Comes, quien propone a la Generalitat construir una apeadero en la vía del tren “para que vengan los más pequeños y, además, aprovechen para ir a la Mitjana. Deben conocer la historia de l’Horta y del Molí”. Confía en que la Paeria haga un buen trabajo de rehabilitación para empezar a impulsarlo.