CANDIDATO A LA PAERIA
Xavi Palau: "Soy el único candidato con principio humanistas y cristianos"
Candidato del PP
Usted es nuevo en la política. ¿Cómo se presenta a los votantes?
Tengo 33 años, hijo de payeses de l’Horta y desde los 23 que soy autónomo. Tengo un despacho propio de abogados. Soy doctor en Derecho y profesor. También soy abogado de colegios profesionales de Lleida y de asociaciones de vecinos, además de consejero del Institut d’Estudis Ilerdencs.
¿Cómo ha llegado a ser alcaldable del PP?
Porque tengo un proyecto de ciudad y de ‘lleidatanisme’ político, social, cultural y económico, que es el sello de mi identidad. Cuando me lo propusieron hace un año y medio, valoré el panorama político de Lleida y me di cuenta de que la sociedad reclama que la gente joven demos un paso adelante, sobre todo aquellos jóvenes con un elemento de calidad, que es la profesionalidad, y que nos ganamos la vida fuera de la política. Creo que los jóvenes somos la generación más preparada de los últimos años. Me di cuenta que el resto de candidatos no defienden un proyecto de ‘lleidatanisme’, de centro-derecha y ninguno tiene los principios humanistas y cristianos de nuestra sociedad, por lo que decidí que Lleida necesitaba un candidato como Xavi Palau.
¿Seguirá la misma línea del PP en este último mandato o hará cosas diferentes?
Me presento para ser diferente y el partido me ha dicho que siga mi propia línea. Quiero hacer proyectos de ciudad útiles para las personas con cualquier fuerza política y que los grupos municipales puedan apoyar mis proyectos para los ciudadanos, ya que las personas deben estar por encima de los partidos e ideologías. No podemos ser la muleta del PSC ni de ningún otro partido. Apuesto por la regeneración y el cambio y Lleida no puede tener un alcalde y un presidente de la Diputación investigados judicialmente, con el apunte de que uno se vuelve a presentar y el otro continúa siendo diputado provincial.
¿Vox es un partido de derecha o de extrema derecha?
No me preocupa Vox. No he leído su programa político. No es mi rival, porque ¿qué tengo que decir de un partido que tiene a su exlíder en prisión provisional?
¿Cree que puede restar votos decisivos al PP?
No. Tengo muy claro que en las municipales se vota a la persona y a su proyecto político. Y en este caso el candidato de centro-derecha ‘lleidatà’ y de los principios humanistas y cristianos en estas elecciones, habiendo desaparecido Unió Democràtica de Catalunya, es Xavi Palau y el PP de Lleida, y lo que haga o deje de hacer Vox me resulta indiferente porque yo ya tengo un proyecto propio, que es lo que necesita la ciudad.
En caso de que el PP sea decisivo, ¿prefiere estar en el gobierno con concejalías o fuera?
Si esto sucede, lo que quiero es contribuir a la gobernabilidad de Lleida estando en su gobierno. Pero eso dependerá de lo que voten los leridanos el 26 de mayo.
¿Se imagina como alcalde?
Sí. Es más necesario que nunca que lo sea una persona de 33 años, con una valía profesional y un ‘lleidatanisme’ que corre por mis venas. Muchos otros candidatos llevan años y casi no han aportado nada. Creo que hay que apostar por el talento, el emprendimiento y el futuro.
El alcalde, Fèlix Larrosa, decidió aplazar la aprobación del POUM. ¿Hay que continuar con el mismo, retocarlo o rehacerlo de nuevo?
Uno de los motivos por los que se ha aplazado es porque yo como candidato puse en marcha un movimiento ciudadano para proteger los Camps Elisis para que no se conviertan en una avenida con vehículos y se construyan 371 pisos. Es contradictorio que continúe adelante un POUM con un alcaldable que abandera un movimiento contrario al Plan de Ordenación Urbanística Municipal. El POUM, con un afán de recaudar dinero, también preveía que muchas viviendas de l’Horta se convirtieran en ilegales y lo que no puede ser es que el ayuntamiento durante 40 años dejara construir allí y ahora diga que son ilegales. El POUM es un ejemplo de la decadencia del proyecto socialista de Lleida y de su gobierno. No hay que volverlo a hacer, hay mucho trabajo detrás, lo que hay que hacer es corregir algunos aspectos.
¿Qué hay que hacer con la Empresa Municipal de Urbanismo (EMU)?
Tenemos 200 millones de euros de deuda, lo que supone 1.428 euros por leridano, de los que entre 45 y 60 millones son de la EMU. Todos aquellos que han gestionado la EMU y los que han sido responsables que se marchen. No es viable que tengamos millones de euros de deuda generados por la EMU, que no sabemos dónde están, y por eso promuevo y defiendo que en la Paeria haya un código ético de gestión pública y que se cree una comisión de Transparencia integrada por profesionales independientes que hagan una auditoría de todas las obras y la financiación de la EMU. Con todo ese dinero, se podría hacer que el parking del hospital Arnau fuera gratuito para los enfermos y sus familiares. Este dinero también permitiría acabar con los barracones y que los colegios estuvieran climatización.
¿Hay que continuar con el concurso de zona azul o municipalizarla?
La zona azul no funciona y muchos barrios se quejan de falta de aparcamiento. Además, si quitan el espacio de la plaza del Auditorio cerrarán muchos comercios. Creo que se tiene de municipalizar para gestionarla mejor y será más barata para los ciudadanos.
¿Qué hay que hacer con la mezquita?
Creo que una buena alternativa sería construirla en el polígono.
¿Cuáles son sus estrategias para generar actividad?
Son fundamentales la Fira de Lleida –para atraer inversiones– el plan de la Estación y el comercio de proximidad y apostar por los productos locales, como los de l’Horta. Además, el plan de la estación ayudará a dinamizar la ciudad y se unificarán los barrios de su alrededor, por lo que les dará un impulso y así la economía leridana crecerá. También hay que crear sinergias con la Universitat de Lleida, la Cámara de Comercio y colegios profesionales, además de abrir una oficina única para ayudar a crear un negocio en 24 horas o hacer una feria del talento. Asimismo, hay que potenciar el turismo y la Seu Vella y parte de ello debe hacerse mejorando la seguridad. Al que cometa actos vandálicos le negaré subvenciones. Hay que mejorar las infraestructuras de los polígonos e incluirlos en la ciudad. Por último, también hay que mejorar la red ferroviaria.
El día de su presentación, dijo que no iba a la manifestación de Colón en Madrid porque quería centrarse en Lleida.
Mi bandera es el ‘lleidatanisme’. Los partidos que en el ámbito municipal presenten proyectos o mociones más allá de Lleida quiere decir que no piensan en la ciudad y que solo quieren caer bien a sus dirigentes. Cuatro años más de mociones ineficaces llevan a la decadencia.
¿Con quién pactará?
Respecto a los proyectos de ciudad, tenemos que hablar todos los partidos. El ayuntamiento va de personas. En cuanto a pactos, evidentemente no pactaré con quienes no quieran negociar conmigo y tampoco con los que llevan 40 años en la Paeria y en la Diputación.
Entonces, ¿no ayudaría al PSC a gobernar?
Si se diera el caso, yo tendría que entrar en el gobierno. Pero hay que hablar de regeneración democrática teniendo en cuenta la situación legal del alcalde y hay que hablar de proyectos de ciudad.