El acusado del crimen de Acadèmia será juzgado el próximo otoño

La Audiencia Provincial de Lleida celebrará el juicio por el crimen de la calle Acadèmia el próximo otoño, posiblemente en el mes de octubre, según señalaron ayer fuentes judiciales. De esta forma, Jordi Lanuza, el instalador de fibra óptica acusado de matar a la funcionaria de Enseñanza Amparo Soler Betés el 17 de febrero de 2017, se sentará en el banquillo y se enfrentará a una petición de condena por parte de la Fiscalía de 15 años de prisión por homicidio. Lanuza lleva encarcelado de forma preventiva desde junio de 2017, cuando fue arrestado por los Mossos d’Esquadra. Precisamente, el próximo mes se cumplirán dos años de su ingreso en prisión preventiva, límite máximo que prevé la ley, por lo que la Audiencia acogerá el próximo 28 de mayo la vista para decidir si prorroga o no su estancia en el Centre Penitenciari Ponent hasta la celebración del juicio. Tanto la Fiscalía como la acusación particular pedirán la prórroga de esta medida cautelar, aún más teniendo en cuenta que el juicio se celebrará en otoño.

El proceso estuvo un tiempo paralizado a la espera del recurso presentado por la defensa ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya para invalidar las imágenes de las cámaras de seguridad del lugar de los hechos, en las que aparece el acusado en el intervalo de tiempo en el que se produjo el homicidio. La defensa pidió anular como prueba las grabaciones de las cámaras de una comunidad de vecinos y una gasolinera alegando que se cometía una infracción contra la intimidad. El TSJC rechazó el recurso y avaló las imágenes, que para la Fiscalía y los Mossos d’Esquadra son uno de los principales indicios contra el presunto autor.

La muerte violenta de Amparo Soler Betés, de 61 años, se produjo en su vivienda en la calle Acadèmia. Según el escrito de la Fiscalía, se inició una discusión entre la víctima y el acusado y este la apuñaló cuatro veces en el cuello “con la intención de acabar con su vida”. Para ocultar que había estado en el interior del piso, según la Fiscalía, el acusado llamó cinco veces a la víctima “a sabiendas de que no recibiría respuesta”. La acusación particular, que representa a la familia de la víctima, pide 22 años y medio de cárcel por asesinato.