Aulas muy calurosas

El calor ha llegado y tanto empresas como domicilios buscan maneras de combatirla, ya sea con aire acondicionado o con ventiladores. Quien también la sufren son los colegios, que denuncian, sobre todo los públicos, que no tienen los recursos suficientes para hacer más soportable el tiempo que tanto maestros como alumnos pasan en la escuela. Ante las críticas, el delegado de Educación, Carles Vega, recordó que “autorizamos llevar a cabo la jornada matinal para no pasar todo el día en la escuela”, y que empieza el 10 de junio.

La directora de uno de los centros explicó que “en algunas aulas hemos llegado a superar los 40 grados en plena ola de calor”. Para estos días de junio, explicó que “hay un ventilador en cada aula que ha costeado el colegio, que encendemos para renovar el aire, aunque no todo el tiempo porque los papeles vuelan y también bajamos las persianas para que no entren los rayos del sol”. Además, intentan que los niños beban agua más a menudo “y de cara a la semana que viene haremos alguna actividad con agua”.

Algunos centros cuentan con ventiladores, cierran las persianas e intentan que los niños beban más agua

USTEC notifica al comité de salud todos los casos en que tiene constancia que se superan los 27 grados

La directora de otro colegio lamentó que “al ser un centro de alta complejidad no tenemos ningún recurso para combatir el calor”.

Por su lado, la directora de otra escuela señaló que todos los centros “hemos pedido muchas veces” medidas que aminoren el calor en las aulas, pero que la respuesta “siempre es que se trata de una situación excepcional que solo afecta muy pocos días durante el curso, y que precisamente por eso las dos últimas semanas hay jornada lectiva matinal”.

Por su parte, fuentes del sindicato USTEC-STEs recordaron que la ley de prevención de riesgos laborales establece que la temperatura en el puesto de trabajo no puede superar los 27 grados, y remarcaron que en las escuelas el calor afecta a los alumnos además de a los trabajadores. También indicaron que notifican al comité de salud todos los casos de los que tienen constancia que se ha superado este registro, pero que lo más habitual es que Educación solo opte por hacer en algún centro pequeñas actuaciones como colocar cortinas o mallas protectoras del sol. “Nos gustaría que se hiciera algo más general”, concluyeron.

Desde Educación, su delegado en Lleida, Carles Vega, explicó que “no instalamos climatización en las escuelas porque pueden provocar problemas de salud, como alergias o súbitos cambios de temperatura”. Aun así, señaló que “en los módulos prefabricados, donde las temperaturas son más extremas, la climatización ya va incorporada”. Para combatir el calor, recordó que “en los lugares donde dar clase sea más inviable, autorizamos hacer la jornada matinal”.

La ciudad de Lleida alcanzó ayer los 32,3 grados a las 14.00 horas y se mantuvo cercana a los 30 durante toda la tarde, según los datos del Meteocat. En Vilanova del Segrià la máxima fue de 32,5 grados, en Alfarràs, de 32,4; en Mollerussa, de 32,2; y en Els Alamús y Alcarràs, de 32 grados.