Con la muerte en los talones

Hace cuatro años, un profesor de la Universidad de Granada envió un correo peculiar a la familia de Claudia Pubill Quintillà, alumna del instituto Guindàvols. Se trataba de una grabación de una hora y media de un exiliado republicano de Purroy de la Solana (en la Ribagorza oscense), Miguel Quintillà Zanuy, donde explica sus vivencias durante la Guerra Civil española y la Segunda Guerra Mundial. “Cuando lo escuchamos con mi familia alucinamos, era un relato de película”, explica Clàudia. En el correo, este profesor de Granada preguntaba si tenían alguna relación familiar con él, por el apellido Quintillà. “Efectivamente, descubrimos que fue un tío de mi abuelo materno”, señala Clàudia, quien desde 2015 se dedicó a investigar y a recopilar su historia. Miguel Quintillà grabó la cinta hace una década, cuando ya tenía 101 años, poco antes de morir.

“Con un tono irónico y como si de una historia de ficción se tratara, inicia su relato explicando que en 1936 huye de Purroy hasta Tremp tras ser acusado de actos violentos. Una vez allí se incorpora a las tropas republicanas y lucha en las batallas de Vilanova de la Barca y la del Ebro. Después de estar en los hospitales de guerra de Sitges y Barcelona, los franquistas lo llevan prisionero a un campo de concentración de Horta, en Barcelona, y es obligado a hacer trabajos forzados. Sin embargo, logra escapar a Francia, pero vuelve a ser detenido y lo llevan a otro campo de concentración, donde decide alistarse en el ejército francés. Más tarde, consigue viajar hasta Gran Bretaña donde se une a las tropas inglesas en el Spanish Company Number One (voluntarios españoles republicanos) hasta 1946. Tras acabar la Segunda Guerra Mundial decide quedarse en Londres y no es hasta 1977 con la ley de amnistía cuando regresa a España, donde se establece en Granada”, relata Clàudia, que explica que “la grabación está cortada, pero he podido conocer toda la historia indagando por los archivos históricos de España, Francia y Gran Bretaña”. Clàudia agradece haber conocido la historia de un antepasado “y lo que yo quería era dejar constancia de lo que sucedió durante la guerra”.

La grabación dura una hora y media pero está cortada y Clàudia ha podido acabar su historia con archivos

La recopilación acabó siendo su trabajo de investigación de Bachillerato, “Con la muerte en los talones. Crónica de una fuga y dos guerras”, y que ha recibido un premio del ministerio de Ciencia (ver desglose).

Otras dos estudiantes del Màrius, entre los 40 mejores estatalesEl trabajo histórico de Clàudia Pubill le ha dado uno de los primeros premios, dotado con 4.000 euros, del XXXI Congreso Jóvenes Investigadores organizado por el ministerio de Ciencia. En el certamen se presentaron un total de 312 estudiantes de todo el Estado, de los que fueron seleccionados 40. Además de Clàudia, también acudieron Itziar Larumbe, alumna de Bachillerato en el Màrius Torres y Carla Vadillo, exalumna del centro y ahora en la UdL. Por sus trabajos, sobre el mejillón cebra y la poeta leridana Celia Viñas fueron galardonadas con 1.000 euros cada una. De los 40 finalistas, solo tres irán en septiembre en Sofía al EUCYS, “European Union Contest for Young Scientists”, concurso de la Unión para jóvenes científicos, y una es Clàudia. “Es una gran oportunidad para conocer otros trabajos muy interesantes”, afirma la alumna del Guindàvols.