POLÍTICA CULTURAL PATRIMONIO
Tatxo Benet: “Esta obra no pudo salvarla el obispo Meseguer y ahora está de vuelta”
Tatxo Benet recordó que “este retablo no pudo salvarlo a principios del siglo XX el obispo Meseguer”, en un guiño también al proceso legítimo de creación del Museu Diocesà, embrión del Museu de Lleida. Por ello, ayer se mostró muy satisfecho de que “un siglo después haya emprendido el camino de vuelta”. Entre medio, toda una odisea que acabó primero con la pieza en Estados Unidos, en una colección privada en Nueva York que, tras la muerte de su propietaria en 1953, se dispersó.
No se conoce cómo apareció de nuevo esta obra en España ni cuándo la adquirió el propietario que, el 22 de diciembre de 2017, la subastó a través de la firma online Setdart. El precio de salida de la puja estaba entre los 200.000 y 250.000 euros y el retablo acabó en manos de una firma de anticuarios de Barcelona.
Tatxo Benet, que no quiso desvelar cuánto le costó comprarlo, explicó que fue el conservador del Museu de Lleida Alberto Velasco quien le llamó la atención sobre el interés de esta pieza, puesto que el artista Pere de Espallargues constituyó junto a Pere Garcia de Benavarrio y el Mestre de Vielha el ‘triunvirato’ más destacado de la pintura de finales del gótico en las tierras de Lleida y Huesca. Espallargues también fue el autor de uno de los retablos del monasterio de Sigena, del que el MNAC conserva algunos compartimentos.
Benet destacó que “se informó tanto al Estado como a la Diputación General de Aragón por si querían ejercer el derecho de retracto y no estuvieron interesados”, por lo que, pasados los plazos legales pertinentes –con inclusión de la obra en el catálogo del Patrimonio Cultural de Catalunya y declararla “inexportable”–, se presenta ahora en Lleida.
El retablo permanecerá hasta otoño en el Espai 0 del Museu, hasta integrarlo en el remodelado espacio de la exposición que acogía los sepulcros ‘emigrados’ de Sigena.