MEDIO?AMBIENTE ACTUACIÓN
Uno de los árboles trasplantados delante de Renfe, a punto de morir
El de la derecha todavía no ha desarrollado las raíces que le permitan succionar el agua || El ayuntamiento lleva a cabo un tratamiento con el fin de intentar salvarlo
Apenas siete meses después de que el ayuntamiento reubicara dos árboles de la rotonda de Ramon Berenguer IV en la plaza de delante de la estación de trenes, uno de ellos se encuentra en situación límite. El hecho de que todavía no haya desarrollado raíz fina, vital para que estos vegetales puedan succionar el agua del riego y de la lluvia, ha provocado que el ayuntamiento haya tenido que actuar para intentar salvarlo. “Durante el seguimiento que se hizo del estado de los árboles una vez fueron trasplantados el pasado enero, se decidió que era conveniente hacerles un tratamiento intensivo de riego con fertilizantes y hormonas para que desarrollaran raíz fina lo antes posible”, señalaron fuentes municipales. En uno de ellos, el que está a la izquierda mirando a la estación, el tratamiento funcionó y ya ha desarrollado este tipo de raíz. No obstante, el de la derecha no lo hizo y “se detectó un nivel elevado de humedad en el suelo, que indica que el árbol no succiona agua lo suficiente debido a que no ha desarrollado la raíz fina. Por ello, se ha decidido cambiar de tratamiento y se le ha cortado el riego para evitar que el terreno se encharque a la espera que se desarrolle la raíz”, alegaron desde el ayuntamiento. Durante estos días se está llevando a cabo una observación exhaustiva del estado de este árbol, que es un castaño de indias. Por su parte, el teniente de alcalde y concejal de Transición Ecológica, Sergi Talamonte, alegó que la reubicación y trasplante de los árboles fue una decisión del anterior gobierno municipal y que “era una operación arriesgada. Ahora se está trabajando por su supervivencia”. La reubicación de estos árboles, que pesan unas doce toneladas en total, se llevó a cabo en enero y la Paeria lo justificó alegando que era la mejor época del año para hacerlo, ya que era cuando los árboles están inactivos. La actuación costó 58.270 euros.
Paralelamente, las altas temperaturas y la reciente ola de calor ha provocado que varios árboles y arbustos de la ciudad estén al límite. Entre ellos algunos de los que se plantaron en jardineras en el barrio del Noguerola, de los que la Paeria dijo que “están sufriendo bastante” y ese riegan periódicamente.