Suspendido un año un urbano por hacer de abogado en horario laboral

La jefatura de la Guardia Urbana ha sancionado a un agente con una suspensión de empleo y sueldo durante un año por vulnerar la ley de incompatibilidades al ejercer de abogado mientras estaba de servicio. Según la información facilitada por diversas fuentes, el expediente se abrió a raíz de que los Mossos d’Esquadra notificaron que el afectado, que es cabo, había acudido a prestar asistencia letrada a una persona llevando el uniforme de la Guardia Urbana. La ley de Policías Locales tipifica como falta muy grave “el incumplimiento de la normativa sobre incompatibilidades”. También especifica que por este tipo de faltas hay dos posibles sanciones: la separación del servicio o la suspensión de funciones y de sueldo por más de un año y por menos de seis. A pesar de ser el mínimo previsto en este caso, es uno de los mayores castigos aplicados a un agente de la Urbana desde hace años.

La resolución ya ha sido notificada al agente, que la ha recurrido por vía administrativa, según explicó él mismo a este diario. En este sentido, afirmó que el contenido del expediente que ha derivado en esta sanción “es todo falso”. Detalló que aparte de la falta muy grave por la incompatibilidad también le han impuesto otra por no informar a los superiores de cuestiones que deberían conocer, y reiteró que “las dos son falsas”. Apuntó que, si como es muy probable, su recurso es desestimado, acudirá a la vía judicial.

El expediente ha sido instruido por el subinspector de la Policía Local de Altafulla

Según su versión, el único motivo de esta sanción “es la animadversión que tiene la jefatura de la Guardia Urbana hacia mi persona”. “Para él no hay nada peor que uno de sus trabajadores pleitee contra la casa”, añadió, señalando que ha ganado los últimos recursos judiciales que ha presentado contra el ayuntamiento representando a otros agentes. También subrayó que la instrucción de este expediente sancionador no ha corrido a cargo de ningún mando de la Policía Local de Lleida, sino del subinspector de la Guardia Urbana de Altafulla. Dijo que es la primera vez que se recurre a un instructor externo y que este subinspector “es famoso en Tarragona por haber impuesto sanciones considerables”.