La baja natalidad obliga a cerrar una decena de líneas de P-3 en Lleida

La provincia de Lleida perderá el próximo curso una decena de grupos de P-3 (alumnos de tres años) respecto al curso pasado, como consecuencia de la continua caída de la natalidad. Esta es la previsión del departamento de Enseñanza para el curso 2019-2020, según indicó el director de los servicios territoriales, Carles Vega, aunque no precisó los centros y municipios que se verán afectados por la supresión de líneas. De hecho, la persistencia de la baja natalidad ya ha provocado la pérdida de uno de diez alumnos de P-3 en cinco años, tal como publicó este diario. En el 2013-2014 había 4.430 niños en ese curso, frente a los 3.990 de 2090 del 2018-2019 y los 3.805 inscritos para el próximo.

No obstante, pese a la disminución general, el delegado apuntó que se han habilitado un total de seis nuevos grupos de P-3 en Lleida ciudad (en el colegio Camps Elisis, que pasa de una a dos líneas), Alfarràs, Alpicat, Juneda, Vielha y Tàrrega. Asimismo, subrayó que está asegurada la continuidad de todos los colegios rurales de Lleida, ya que no hay ninguno que no llegue al número mínimo de estudiantes, a pesar de que en el inicio de la preinscripción parecía que alguno podía estar en riesgo de cierre.

Al finalizar el plazo oficial de preinscripción, Educación registró 3.805 solicitudes para 4.487 plazas de P-3 ofertadas en el conjunto de la provincia para el próximo curso, lo que supone que quedaron vacantes una de cada seis (un 15,19%). Sin embargo, que queden plazas libres no significa que los niños entren en el centro elegido en primera opción por las familias, puesto que es habitual que unas escuelas tengan ‘overbooking’ de peticiones mientras que otras reciban pocas.

En primero de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), la preinscripción se saldó con 4.699 solicitudes para 4.920 plazas. Por tanto, quedaron un 4,49% de vacantes, pero ocurre como en P-3 y algunos centros tienen más demanda que otros. En el caso de Cappont, el déficit es estructural porque no dispone de instituto y los padres de las tres escuelas del barrio llevan años reclamándolo. Al respecto, la Paeria se comprometió a trabajar con Educación para intentar llevarlo adelante.

Lucha contra la segregación y nuevo mapa escolar en la capital El director de los servicios territoriales de Educación, Carles Vega, insistió en la necesidad de luchar contra la segregación escolar de forma conjunta con los ayuntamientos. En esta línea, indicó que uno de los objetivos debe ser “crear las condiciones en el entorno comunitario de los centros afectados para que las familias quieran escolarizar allí a sus hijos y no opten por hacerlo en otros”. En la ciudad de Lleida, ya existe una comisión encargada de combatir la segregación, en el marco del consejo escolar municipal. Vega también reiteró que tienen previsto revisar el mapa escolar de Lleida ciudad, tanto por lo que respecta al área de influencia de los centros de Primaria como a la adscripción de estos a los institutos. “El actual mapa ha quedado desfasado, no solo no ha habido una revisión en profundidad del mismo desde hace mucho tiempo, sino que los retoques parciales que se han hecho han generado desequilibrios”, manifestó. Además, el delegado apuntó que hay que valorar si todos los institutos mantienen invariable su oferta o bien se introducen cambios, como por ejemplo que haya alguno que se especialice en Formación Profesional o que solo imparta la Secundaria Obligatoria.