ECONOMÍA EIX COMERCIAL
Comercio local menguante
Los pequeños comerciantes critican la “invasión” de franquicias, la dificultad para seguir adelante con sus negocios y las pocas ayudas públicas || El presidente del Eix asegura que las tiendas de proximidad siguen dominando la calle Major y lamenta que no haya relevo generacional
La joyería Calzada y Modas Andreu son los dos últimos comercios locales del Eix que han bajado la persiana estas últimas semanas, pero son decenas las tiendas de proximidad que han cerrado en los últimos lustros. Y es que, de hecho, la principal arteria comercial de la ciudad se ha ido llenando de grandes marcas. Basta con dar un paseo por el Eix para ver establecimientos de cadenas y franquicias por doquier en la que antes era una vía de comercios tradicionales y “de los de toda la vida”. De hecho, algún comerciante, como Marta Llinás, de la pastelería Terés, todavía recuerda “cuando pasaban coches por la calle Major, nos conocíamos todos los comerciantes; hacíamos piña y en la calle había gente y vida hasta pasadas las once de la noche”. Ante un futuro cada vez más incierto para el pequeño comerciante, algunos piden que las administraciones les protejan o les den facilidades, aunque la mayoría de ellos señala que “necesitamos ayuda, sí, pero hace 10 años que la pedimos, ahora ya es tarde, muchos de los comercios locales que quedan echarán el cierre en cuanto los que lo llevan se jubilen, porque no hay relevo y, en muchos casos, no es ni rentable”, dice Llinás. Por contra, otros comerciantes piden simplemente que “nos dejen hacer” y no recibir “ni ayudas ni problemas” por parte de la administración, como es el caso de Joan Guarro, de Casa Guarro, mientras que Ernesto Gimeno, de la cuchillería Blanco, asegura que el modelo comercial para el Eix se hizo mal. “Yo no habría permitido que se instalaran tantas franquicias, el centro de la ciudad es para el comercio local y poco a poco nos han ido echando o cerrando”, lamenta.
Visibilidad
Frente a esta visión pesimista, el presidente de los comerciantes del Eix, Llorenç González, recuerda que “en 2018 hicimos un estudio y las cadenas y franquicias suponían el 45% del total de tiendas de la calle Major, mientras que el resto eran comercios locales o franquicias gestionadas por empresarios locales. No es que haya pocos comercios de proximidad, lo que pasa es que no tenemos tantos medios como las grandes marcas y cuesta hacernos visibles”, asegura González. No obstante, para él, el problema para el comercio local no son las franquicias. “Lo que nos está matando es que no hay relevo generacional, debemos reinventarnos y seguir”, concluye.
EN PRIMERA PERSONA
«Hay que adaptarse y saber diferenciarse de las franquicias»: Eduard Agudo, Josa i Gassó
Fundada en 1901, la tienda de ropa y complementos del hogar Josa i Gassó ha visto evolucionar el Eix en este último siglo. Su gerente, Eduard Agudo, afirma que, con la llegada de las franquicias “te tienes que adaptar y lo único que podemos hacer es diferenciarnos de ellas, ya sea con la especialización o con el trato personal, es vital ganarse a la clientela y establecer un vínculo”. En cuanto a si el comercio local debería recibir ayudas o no, Agudo cree que primero “hay que potenciar todas las ayudas posibles al Eix Comercial”.
«Las ayudas al comercio local llegan tarde, quedamos pocos»: Marta Llinás, pastisseria Terés
“Recuerdo que cuando era pequeña había mucha hermandad entre los comerciantes y nos conocíamos todos, ahora hay demasiadas franquicias”, señala Marta Llinás, la tercera generación al frente de la Pastisseria Terés y que entiende este cambio como “la evolución de la sociedad, la gente quiere inmediatez y eso es lo que dan las franquicias”. Asimismo, Llinas se muestra muy crítica con el ayuntamiento. “Dicen que ahora quieren ayudar al comercio local, pero yo les digo que ya es tarde, ya quedamos muy pocos”, lamenta.
«Pido que las administraciones no pongan tantas trabas»: Joan Guarro, Casa Guarro
Uno de los establecimientos más míticos y conocidos del Eix, Casa Guarro, aboga por “que nos dejen hacer a nosotros” antes que recibir ayudas o protección de las administraciones. “No deben poner tantas trabas a nivel logístico, deben dejarnos hacer sin poner muchas trabas, porque si tu negocio innova y trabaja, puede salir adelante”. Pese a ello, reconoce que en los últimos años las franquicias han ganado mucho peso en el Eix y que “hoy por hoy, abrir un comercio local como el nuestro sería imposible que funcionara”.
«No se ha protegido al pequeño comercio»: Ernesto Gimeno, cuchillería Blanco
Ernesto es la segunda generación que, desde hace 63 años, levanta la persiana de la cuchillería Blanco cada día. “Respecto al Eix con el que me críe echo de menos mucha tienda pequeña y familiar, sobran franquicias”, sentencia, al mismo tiempo que recalca que “para mantener una tienda pequeña tantos años en el Eix debes especializarte”. No obstante, se muestra pesimista y cerrará cuando se jubile. “Yo no hubiera permitido que se instalaran tantas franquicias y habría protegido al pequeño comercio, cosa que no se ha hecho”, sentencia.