El nuevo curso empezará con 178 alumnos menos de P-3 y 66 más en primero de ESO

Lleida sigue perdiendo alumnos de P-3, básicamente por el descenso continuado de la natalidad, y para el próximo curso que comienza el día 12 hay inscritos casi doscientos menos que el curso anterior. La conselleria de Educación afirma que hasta el pasado día 22 de agosto había 3.656 matriculados en centros educativos de la provincia, lo que supone 178 menos que los 3.834 del inicio del curso 2018-2019, según las estadísticas del propio departamento. A modo de ejemplo, en el curso, 2013-2014 había 4.430 niños en P-3, más de 700 más que ahora.

En cambio, la tendencia en primero de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) es la inversa y el próximo curso Lleida ganará 66 alumnos. En concreto, hay 4.392 estudiantes matriculados frente a los 4.326 del anterior.

No obstante, hay que tener en cuenta que las cifras del próximo curso pueden variar puesto que todavía está en marcha la última fase de inscripciones, indicó el director de los servicios territoriales de Educación, Carles Vega.

De los 3.656 alumnos matriculados en P-3 para el curso 2019-2020, un 77% irán a centros públicos (2.816 estudiantes) y el resto, a concertados (840). La distribución entre los inscritos en primero de ESO es similar, de manera que de los 4.392 estudiantes, 2.816 irán a la pública (un 75%) y 1.102, a la privada.

Por otra parte, Vega reafirmó que “este año se normalizará la gestión del comedor y el espacio de mediodía por parte de las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos”. Señaló que “está previsto que se apruebe la ley de contratos de servicios a las personas en Catalunya y en el marco de esta normativa se podrá desarrollar un decreto para que las AMPA puedan regularizar la gestión que hasta ahora hacen de manera alegal”. Educación inició el curso pasado un proceso participativo sobre la gestión del espacio de mediodía y en junio la Escuela Oficial de Idiomas acogió una sesión que sirvió para constatar la reclamación de padres y centros de que las AMPA lo gestionen.

El Carme de Mollerussa pierde un grupo de P-3

Educación ha suprimido el concierto de un grupo de P-3 de la escuela Vedruna El Carme de Mollerussa de cara al próximo curso, de moso que este centro se quedará con dos líneas. Así lo confirmó ayer el director de los servicios territoriales de Educación, Carles Vega. De este modo, la oferta de P-3 en la capital del Pla d’Urgell será de seis grupos en total: uno en el colegio Les Arrels, dos en el Ignasi Peraire, dos en el Pompeu Fabra y los dos citados de la Vedruna.

El Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) publicó el pasado 26 de junio una resolución de modificaciones de conciertos educativos con centros privados para el próximo curso al no haber conseguido suficientes alumnos durante la preinscripción. Este documento incluía la línea citada de la escuela Vedruna de Mollerussa y también de dos más de otros dos centros concertados de Lleida ciudad: Fedac y Sagrada Família.

Tras la preinscripción, Educación preveía que las comarcas de Lleida acabarían perdiento una decena de líneas de P-3 en total, pero entonces no precisó si serían de centros públicos y privados ni en qué municipios, Vega no pudo precisar ayer si se confirma esta previsión.

En cambio, sí detalló que se ha conseguido llenar aproximadamente la mitad del segundo grupo de P-3 que han creado en la escuela Camps Elisis de Cappont, para paliar la falta de plazas escolares en el barrio. El delegado indicó que hay entre 32 y 34 alumnos para las 44 plazas ofertadas (22 por línea). Consideró un éxito estas cifras y destacó que esperan atraer a todavía más familias con el desarrollo del programa Magnet.

La prueba de catalán, principal escollo del primer día Ayer arrancaron las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) de septiembre para 5.400 estudiantes, 335 de los cuales la hacen en Lleida. En esta primera jornada se hicieron las pruebas de lengua catalana y castellana como asignaturas de la fase común y ciencias de la tierra, fundamentos de las artes, matemáticas aplicadas a las ciencias sociales, análisis musical, dibujo técnico y literatura castellana de la fase específica. En cuanto a las impresiones de los alumnos respecto a cómo habían ido los primeros exámenes, la mayoría de los leridanos señalaron que catalán les había parecido más difícil que castellano y que las preguntas más complicadas eran las que hacían referencia a la sintaxis y las oraciones subordinadas. Asimismo, muchos de los que se han presentado a las PAU de septiembre lo han hecho con el objetivo de mejorar su calificación de junio. La selectividad, que acaba mañana, continúa hoy con las pruebas de lengua extranjera, dibujo artístico, latín, matemáticas, historia del arte, química e historia en catalán y en aranés.