Más de 500 personas en la marcha independentista

Bajo una intermitente lluvia, más de medio millar de personas recorrieron ayer el Eix Comercial de Lleida convocadas por la izquierda independentista bajo el lema “Organitzem el poder popular. Cap a la independència no hi ha dreceres”. A ritmo de gralles y tambores, corearon consignas como “1 d’octubre, ni oblit ni perdó”, “llibertat preses polítiques”, “vam votar, vam guanyar” y “sense desobediencia no hi ha independència”.

Antes de iniciar la manifestación, Eulàlia Reguant, exdiputada de la CUP e integrante del secretariado nacional, admitió que esta Diada se ha visto enturbiada por “un gran desconcierto y un cierto miedo a la poca participación”, pero incidió en que la izquierda independentista lleva muchos años saliendo a la calle cada Onze de Setembre “y lo seguirá haciendo para combatir la resignación”. Asimismo, defendió la necesidad de “organizarse para dar respuesta a la sentencia” del juicio al ‘procés’, que cree que será “la primera de muchas que vendrán en las que quedará patente la manera en el que Estado tratará la disidencia política”. Consideró que “hay que entenderlas como unas sentencias contra todo un pueblo” y apostó también por organizarse “para seguir defendiendo y ejerciendo todos los derechos que serán y son condenados de manera sistemática”. Por su parte, Ermengol Gassiot, secretario general de la CGT en Catalunya, dijo que la Diada viene marcada por un “contexto de represión”,cargó contra la denominada ley Aragonès y las privatizaciones y lamentó la situación de los temporeros en Lleida. “Una sociedad no es libre si no se garantizan las condiciones de vida de toda la población”, remarcó.

La manifestación, convocada por la CUP, Arran, Endavant y Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans, finalizó con un acto político en Blondel.