ESNOTICIA
El curso empieza con educación sexual en P-3 y críticas al calendario
Formación afectiva en 30 centros, mientras las Ampas ven excesivo el parón estival
El nuevo curso 2019-2020 empezó ayer para casi 66.000 alumnos de Lleida con el anuncio de que entre 25 y 30 centros públicos (300 en Catalunya) incorporarán desde P-3 la educación afectiva y sexual. Asimismo, los padres destacan de nuevo la necesidad de reorganizar el calendario para reducir la duración de las vacaciones de verano.
El curso comenzó ayer en Lleida para 65.948 alumnos de educación Infantil, Primaria, ESO, Bachillerato y FP (menos los 3.135 de ciclos superiores) con el anuncio de la Generalitat de que incorporará la educación afectiva y sexual desde P-3 (alumnos de tres años) en unos 300 centros públicos de Catalunya, de los cuales entre 25 y 30 serán de Lleida, según confirmó el director de los servicios territoriales de Educación, Carles Vega. El programa ‘Coeduca’t’, que se comenzará a implantar en octubre desde P-3 a cuarto de ESO, prevé llegar a todos los centros públicos en tres años (hasta el curso 2021-2022 ) y se iniciará en centros que ya trabajan la coeducación. La conselleria explicó que se introducirán contenidos programados en la tutoría grupal e individual, y también actividades escolares y extraescolares con esta perspectiva, adaptadas a las necesidades de cada etapa. Por ejemplo, en Infantil, que niños y niñas jueguen con muñecas y coches, y en Primaria y ESO, usando películas. El programa se deberá incorporar al proyecto de dirección y al educativo del centro, que deberá contar con una persona referente y crear un nuevo perfil profesional específico de coeducación y perspectiva de género. Educación destacó que el programa no será igual en todos los centros, ya que se adaptará a cada perfil, y que se hará formación a docentes, además de trabajar con las universidades para que lo incluyan en las facultades.
Por otra parte, las clases comenzaron con un rebrote del debate sobre la duración de las vacaciones escolares, de casi tres meses, que dificultan la conciliación laboral y familiar. La mayoría de representantes de las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) de escuelas e institutos de la capital consultadas por este diario consideraron que resultan demasiado largas y plantearon la posibilidad de que el curso comience unos días antes en septiembre, o bien se prolongue un poco más en junio. No obstante, varias pusieron de manifiesto que la climatología de Lleida puede dificultar esta medida, puesto que en ocasiones en mayo y junio las temperaturas son altas y en las aulas se alcanzan incluso los 35 grados. La presidenta de otra AMPA apuntó también la necesidad de revisar el horario escolar, no solo el calendario, y otra apostó por la jornada intensiva en Primaria.
Mireia Folguera, del AMPA del colegio Jaume Balmes de Cervera, señaló que “dos meses y medio de vacaciones seguidas comportan problemas de organización familiar. Habría que establecer dos periodos más cortos. Con todo, ir a clases en el tiempo de máximo calor no es recomendable”. Joan Salvadó, del AMPA de la escuela Maria Mercè Marçal de Tàrrega, también abogó por repartirlas “durante el año, con periodos de una o dos semanas, y no alargar tanto las de verano”, informa Segre Tàrrega. Desde el AMPA del colegio Rosa Campà de Montferrer i Castellbò opinaron que “los niños y niñas ya no saben qué hacer y están agobiados los últimos quince días” antes de empezar el curso, informa C.Sans. Apuntaron también a un reparto las vacaciones a lo largo del curso, reduciendo los días de verano, y añadieron que “hacer una parada de quince días durante el invierno resultaría beneficioso” para los alumnos. Desde el AMPA del colegio Pau Claris de La Seu d’Urgell se refirieron al modelo de Francia como método óptimo. “Repartir las vacaciones a lo largo del curso y no concentrarlas en verano” podría dar un buen resultado, opinaron. “La última semana antes de empezar la escuela se hace eterna para niños y padres”, concluyeron.
USTEC reclama 650 docentes más para Lleida y critica las plazas ‘a medida’ El sindicato USTEC-STEs reclama a la Generalitat que aumente la partida para educación a través de un decreto y considera que Lleida necesita 650 docentes más. Afirma que si los maestros mayores de 55 años pudieran reducir dos horas su jornada lectiva se podría contratar a 60 y pide convertir los tercios de jornada en medias. Ve una “privatización encubierta” en la potestad de los directores de poder elegir a docentes a través de una entrevista y cree que la plazas ‘perfiladas’ en función de las necesidades del centro pueden dar lugar a nepotismo.