La escuela de Tírvia se mantiene con seis alumnos

Maria, Enrique, Àlex y Jessé son los alumnos que comenzaron ayer el curso en Tírvia, en el Pallars Sobirà, y en los próximos días se sumarán dos niñas más. En total, serán seis, el mínimo para poder seguir abierto. Todos van a la misma aula y una docente les dará clase a todos, desde P-3 a sexto de Primaria. La voluntad del ayuntamiento es que la escuela no cierre. Desde 2002, cuando hizo un llamamiento a familias con hijos para que se instalaran en el pueblo para salvar el centro, se ha mantenido con el mínimo de inscritos. Las familias de los alumnos, excepto una, viven en pisos municipales. Para ello, se prioriza a las familias con más hijos y con un periodo de escolarización a largo plazo y se requiere que inscriban a sus hijos en Tírvia. En la población viven de forma regular unas ochenta personas y hay familias que llevan a sus hijos a otras escuelas. La directora del centro defiende el sistema de la escuela rural y afirma que velará por una mayor relación con otros centros de la Zona Escolar Rural.

Por otra parte, el ayuntamiento de Albesa se reunirá lunes en Barcelona con el director general de Centros Públicos para analizar las deficiencias estructurales de la escuela y las posibles soluciones.