Pueyo ve grave la situación económica de la Paeria pero no subirá impuestos

La situación económica de la Paeria es “grave, pero no crítica”, con una deuda de 175 millones y el 77% del presupuesto para 2019 ya ejecutado a principios de julio. Así lo afirmó ayer el gobierno tripartito municipal (ERC, JxCat y el Comú), que está convencido de que podrá revertir la situación sin aumentar los impuestos a los ciudadanos.

El ayuntamiento de Lleida tiene actualmente una deuda de 175 millones, de los que 82 corresponden estrictamente a la Paeria, 51,9 a la Empresa Municipal de Urbanismo (EMU) y 41,17 al parque científico de Gardeny. Además, el 77% del presupuesto para todo 2019 ya estaba ejecutado a principios de julio y algunas partidas, totalmente agotadas (ver gráfico anexo) y con facturas pendientes de pago, “que podían obedecer a cierto entusiasmo electoral”. “La situacion económica es grave, pero no crítica. La deuda es enorme, lo intuíamos, pero seguro que seremos capaces de revertir la situación sin recortar los derechos de los ciudadanos ni generar más deuda. Que no sufran, porque no tenemos intención de incrementar ni tasas ni impuestos”, más allá de aplicar el IPC, afirmó el alcalde, Miquel Pueyo, al frente del gobierno tripartito municipal formado por ERC, JxCat y el Comú desde junio. La teniente de alcalde Jordina Freixanet dijo que no aumentarán la presión fiscal de las familias pero explorarán aplicar tasas a grandes entidades. Pueyo apuntó que reconducirán la situación “ahorrando gastos superfluos, ajustando las partidas, revisando concursos y siendo exigentes con los contratos” e instó al resto de grupo municipales a “hacer piña” con el gobierno. “Lo que explicamos no va contra nadie (en referencia al anterior gobierno del PSC). Es un ejercicio de responsabilidad, transparencia y compromiso con la ciudadanía”.

La tenienta de alcalde y edil de Recursos Municipales y Hacienda, Montse Pifarré, detalló que la carga financiera que debe asumir este año la Paeria es de 33,7 millones, de los cuales 9,3 son para amortizar deuda y 2,2, para intereses. En el caso de la EMU, la carga para es de 6,7 millones (1,4 para amortización, 1,5, para intereses y 3,8 en proceso de refinanciación). Y el parque de Gardeny debe afrontar 15,4 millones este año, de los que 15 están en proceso de refinanciación porque no había previsión presupuestaria. Pese a ello, la Paeria apuesta por el parque porque emplea a 1.450 personas y generar un impacto económico en la ciudad de unos 170 millones y tampoco quiere liquidar la EMU, aunque remarca que estudiará su viabilidad y revisará su estado financiero, en el que han detectado “irregularidades contables”. Además, la elevada deuda ha provocado un estancamiento en la capacidad inversora (5,9 millones en 2018). Los tenientes de alcalde Toni Postius (JxCat) y Sergi Talamonte (el Comú) remarcaron que el pasado mandato, desde la oposición, fueron muy críticos con la gestión económica del ayuntamiento.

Festes de Tardor austeras y con 10.000 € por pagar de las de mayo La edil Montse Pifarré subrayó que “tendremos que asumir las Festes de Tardor sin un solo euro y, además, con 10.000 de facturas de las de Maig”. En este sentido, la concejala Jordina Freixanet aseguró que la fiesta mayor de otoño no costará “ni un 10% de lo que costó la de mayo” y que sacarán dinero “de donde sea”. Asimismo, un 85% de la partida para Urbanismo también está agotada y Pifarré apuntó que de los 6 millones de ingresos previstos para este año en venta de solares “no se ha llegado ni a 300.000 euros”. Las partidas más agotadas son las de Fomento de la Ocupación (100%), Educación (95%), Medioambiente (93%), Cultura (90%) y Serveis Socials (88%).