ENTREVISTA POLÍTICA
José Luís Ábalos: «La inversión en AVE ha restado recursos de la red convencional»
El ministro de Fomento en funciones y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, censura en esta entrevista el llamamiento del presidente de la Generalitat a la desobediencia civil como respuesta a la sentencia del Supremo sobre el ‘procés’ y dice que el Gobierno central tiene plena confianza en la actuación de los Mossos. Por lo que respecta a su ministerio, aboga por un cambio de modelo en las prioridades en materia ferroviaria en favor de la red convencional y de cercanías frente a la “altísima” inversión en el AVE.
Quim Torra insta al Parlament a dar una respuesta a la sentencia del supremo basada en la autodeterminación, e insiste en la desobediencia. ¿Es partidario de aplicar otra vez el 155 si se dan pasos en este sentido?
Los incumplimientos y las respuestas a ellos no deben depender de la voluntad política, porque estaríamos en una situación de arbitrariedad, que es lo contrario a un estado de derecho. El presidente de la Generalitat no solo está obligado a cumplir la ley, sino a hacerla cumplir. El artículo 155 de la Constitución está pensado para hechos muy tasados y es muy garantista. No se trata de ser partidario o no, sino de si se dan los hechos. Otros hacen del 155 una bandera vinculada a la represión de planteamientos políticos, nosotros no. No podemos plantear un 155 preventivo, porque se escapa del estado de derecho. Pero, si se dan los hechos y se pone en cuestión el funcionamiento de los servicios públicos, o hay un uso de la institución que sale del ordenamiento jurídico, el recurso está ahí.
El jueves los mandos de los Mossos se sintieron desairados por el discurso del jefe de la Guardia Civil en Catalunya. ¿Confía el Gobierno en los Mossos?
Tenemos confianza en la profesionalidad y lealtad de un cuerpo que es parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.
¿Y si se ven en la disyuntiva de obedecer a la Generalitat o al Gobierno?
Saben perfectamente a quién deben obedecer como profesionales que son. No existe la obediencia debida en un estado de derecho. Aunque haya una orden, si contraviene la ley uno no está obligado a cumplirla, así que no hay conflicto institucional o de subordinación. El Gobierno y el ministro del Interior tienen confianza en este cuerpo.
¿Ve viable una salida a corto plazo al conflicto por el ‘procés’?
La salida la tienen que dar los que nos metieron en ello. El gran problema del procés es que no hay hoja de ruta. Lo han planteado precipitadamente, por lo que fuera, y han metido a buena parte de la población en un proceso que no se sabe qué pretende más allá de la meta final.
¿Usted también dormiría mal en un Gobierno con UP?
Sentirse vigilado no es agradable, y menos en el gobierno. Podemos dijo que quería estar para vigilar que el Gobierno cumple. Se está viendo que hubiera sido un gran error. Hubiéramos evitado las elecciones y confirmado el relato de la derecha sobre nuestros socios, que queríamos romper España, que Sánchez quería gobernar a cualquier precio…y se ha demostrado que era un puro cuento.
Y si el 10-N el reparto de diputados por bloques es similar, ¿cómo se soluciona el bloqueo?
Lo deben solucionar los bloqueadores, que ahora abogan por el desbloqueo. En abril se planteó un plebiscito sobre el presidente Sánchez, con el veto de Cs, con el PP diciendo fuera el okupa y la foto de Colón con Vox. Respuesta: Sánchez logró 123 diputados y el segundo, 66. El relato de la derecha ahora es ofrecer pactos de estado, pero el primero es respetar el resultado y permitir formar gobierno.
¿Usted es partidario o no de peajes en las autovías?
Soy partidario de un acuerdo sobre cómo mantenerlas. En el resto de las infraestructuras el usuario paga. Si usa el ferrocarril, el avión o el barco, paga, pero en esta, curiosamente no lo tenemos claro. No antepongo ningún modelo, pero hay un uso que cuesta dinero. No solo su construcción, sino su conservación, y los presupuestos del Estado llegan donde llegan. La red de carreteras crece más que la asignación presupuestaria, por lo que cada vez hay menos dinero para conservación y nos encontramos en situaciones muy delicadas para financiar la conservación de carreteras. También hay hipocresía. No puede ser que el PP haga campaña en contra cuando estando en el Gobierno, en 2012 y a principios de 2018, planteó por dos veces una propuesta de peaje en autovías.
En este contexto, ¿no podría prorrogar la concesión a punto de vencer de varias autopistas?
Este Gobierno es el único que no ha prorrogado la concesión de una autopista que haya finalizado. Hemos liberado la AP-1 en Burgos y en diciembre se liberará la AP- 7 entre Tarragona y Alicante y la Cádiz-Sevilla. También es el Gobierno que más ha aumentado las bonificaciones para el uso de la autopista.
La Generalitat plantea ampliar hasta Lleida el desvío obligatorio de camiones a la autopista desde la N-240. ¿Lo ve viable?
Cuando llegamos al Gobierno asumimos el proyecto del PP y lo agilizamos mucho para que fuera efectivo en el verano. No entramos en una ampliación para evitar aplazarlo. Podríamos revisarlo, claro que sí, de hecho lo estamos haciendo.
La concesión de la AP-2 acaba en 2021.¿Podría usarse como un tramo de autovía Lleida-Tarragona?
Tenemos que dotar de racionalidad al conjunto de infraestructuras. Donde hay una no podemos hacer otra doble. En la AP -7, ya hemos encargado un proyecto para las conexiones. Pero hay que racionalizarlo, porque si no no será una vía de alta capacidad. Acabo de ver al conseller y estamos de acuerdo en coordinarlo. Aquí la Generalitat sí tiene un modelo claro, que es la euroviñeta. Nosotros no tenemos un modelo prefijado
La línea ferroviaria Lleida- Manresa está en mal estado. ¿Hay alguna previsión de inversión o de traspaso a la Generalitat?
En materia ferroviaria creemos que el país ha invertido muchísimo en alta velocidad.
¿Demasiado?
Mucho. Vamos a dejarlo aquí. Somos el segundo país del mundo en kilómetros de alta velocidad. Es una altísima inversión y esto ha supuesto detraer recursos de la red convencional y cercanías. Nosotros intentamos girar este rumbo en los presupuestos que desgraciadamente no salieron, Ahí se plasmaba un claro cambio de política en favor de la red convencional y cercanías, que mueve 440 millones de viajes. Hay un cambio de posicionamiento político. En Rodalies de Barcelona, en el tiempo que llevamos hemos invertido 450 millones. Nuestra apuesta va por modificar el modelo.