Investigan a los dueños de dos granjas del Segrià por falsedad documental

El Seprona de la Guardia Civil investiga a los responsables de dos explotaciones ganaderas de la comarca del Segrià por un supuesto delito de falsedad documental al asignar supuestamente crotales −piezas de plástico que identifican de forma individual a cada animal− de terneros muertos a animales vivos. La investigación se inició hace tres años cuando, en Asturias, se detectó que una persona llevaba en el maletero de su vehículo varias de estas piezas identificativas, algunas de las cuales se correspondían con reses ubicadas en explotaciones del Segrià. Tras la comprobación de todos códigos de los crotales, el Seprona verificó que se realizaban transacciones de ganado vacuno incumpliendo la normativa, alterando los datos de trazabilidad al asignar los crotales de reses muertas nuevamente a otros animales. Tras una inspección llevada a cabo el pasado mes de mayo, los agentes también comprobaron que una de las granjas tenía vigente una suspensión cautelar de su actividad al carecer de licencia ambiental, y sin embargo se criaban reses utilizando la documentación de otra explotación, según informó la Guardia Civil. Durante la operación policial, se cotejaron los documentos de trazabilidad de más de mil animales repartidos por las explotaciones de varias provincias, verificando que 61 crotales fueron empleados en distintos animales. Por estos hechos, se investiga a un total de 3 personas, dos de ellas residentes en la provincia de Lleida y un tercero en el extranjero. Según apuntan desde la Guardia Civil, estos hechos se encuadrarían dentro del delito de falsedad documental al suponer la simulación de un documento público y el tráfico de documentos de identidad falsos.