Juzgan a dos jefes de mossos acusados de no investigar la paliza a un leridano

La Audiencia de Tarragona inició ayer el juicio contra el intendente Jaume Morón, ex jefe de los Mossos en el Tarragonès, y el sargento leridano Xavier Cunillera, acusados de evitar una investigación contra dos policías locales de Vila-seca que propinaron una paliza a un vecino de Lleida en enero de 2013. La Fiscalía sostiene que los acusados evitaron impulsar la investigación y obviaron informaciones clave con el objetivo de que el juzgado archivara el caso, por lo que pide una condena de cinco años de prisión, siete de inhabilitación y 7.200 euros de multa por los delitos de omisión del deber de perseguir delitos y falsedad documental. En cambio, las defensas solicitan la absolución. Enric Rubio, letrado de Cunillera, aseguró ayer a este periódico que “actuaron correctamente y niegan cualquier negligencia”. Está previsto que los dos acusados declaren mañana.

Ayer declaró la cabo que inició la investigación de la paliza. Explicó que las gestiones que hacía las trasladaba al sargento Cunillera, su superior, para mantenerlo informado. Según declaró, el sargento le pidió reunirse con el intendente que, según su versión, le pidió que revelara la identidad del informador (un policía local). Ella dijo que se negó aduciendo que “le ponía en peligro y partía de la confianza de esta fuente”, y añadió que la “encerraban sistemáticamente” para hablar del caso. Finalmente, la cabo dejó el caso en manos del sargento. Fiscalía dice que Cunillera y Morón actuaron sabiendo que, con los pocos datos aportados, el caso se archivaría, como sucedió.