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Decimotercera multa a un edificio de la calle Sant Carles de Lleida
De tres mil euros al no hacer obras la propiedad para garantizar su habitabilidad || El bloque es de una entidad bancaria
El ayuntamiento ha multado por decimotercera vez a la entidad Buildingcenter, una sociedad de Caixabank, por no llevar a cabo una serie de mejoras en un edificio de su propiedad. El inmueble en cuestión es el número 11 de la calle Sant Carles y la sanción impuesta es de 3.000 euros. Asimismo, la Paeria ha instado a la propiedad a hacer las obras en un plazo máximo de dos meses. En caso contrario, podría sancionarle de nuevo.
Las reparaciones que el consistorio ordena hacer a Buildingcenter son subsanar los desperfectos en el cableado eléctrico y las tuberías de gas del edificio después de que el pasado verano fueran dañados por los autores de un robo en uno de los locales del inmueble. Asimismo, le reclama que pague una serie de actuaciones que la Paeria tuvo que ejecutar de forma cautelar, como reparar las grietas de una de las paredes del edificio, tapiar una ventana y la retirada de una verja metálica. Estas deficiencias han provocado “un incremento en el nivel de degradación, seguridad e higiene del inmueble, con el consecuente peligro para la salud y la seguridad de las personas que se ha agravado con las reiteradas okupaciones que ha sufrido en los últimos años”, según detallaron los técnicos municipales en un informe. Con esta nueva multa, el edificio se ha convertido en uno de los más sancionados de la ciudad. Ahora mismo, acumula las mismas multas que el número 22 y 24 de la calle Sant Martí, que tampoco reúne las condiciones de habitabilidad necesarias tras haber sido okupado y saqueado en varias ocasiones.
La Paeria ha instado a la propiedad a reparar los daños en la red eléctrica y las tuberías de gas
Un portavoz de la asociación de vecinos de Jaume I declaró que “no nos sorprende para nada esta nueva multa, es un edificio que siempre ha tenido problemas y ha sido okupado reiteradas veces”. El portavoz vecinal añadió que “los okupas entraban por los locales y una pequeña ventana que hay encima de la puerta, que ya han tapiado”. Debido al número de multas que acumula, el portavoz bautizó el edificio “como el hermano gemelo del número 22 de Sant Martí”.