Medicina quiere un test psicotécnico de acceso

Evaluar con una prueba previa si los futuros estudiantes de Medicina soportan la ansiedad, el estrés y la presión y tener empatía es lo que plantea hacer la Generalitat para determinar si están preparados para ser médicos. La Secretaría de Universidades e Investigación y los decanos de las ocho facultades de Medicina de Catalunya están estudiando añadir un test psicotécnico en la selectividad para esta carrera, a partir del año que viene. “Ser un profesional de la salud no es cualquier cosa”, apunta la decana de Medicina de la Universitat de Lleida (UdL), Anna Casanovas. “Hemos detectado estudiantes con trastornos psicológicos, como ansiedad y depresión, que están en tratamiento psicológico o toman antidepresivos”, explica. De hecho, asegura que “en la UdL hay una unidad que trata a estos alumnos, pero el único psicólogo que hay no da abasto”.

La idea de llevar a cabo este test “proviene de los buenos resultados de la prueba de aptitud personal (PAP) para acceder a los grados de Educación”, según Casanovas, que añade que “este test valoraría el grado de ansiedad, el estrés, su habilidad y la empatía, ya que hay quienes no miran a los ojos cuando tienen una conversación y es muy importante hacerlo con los pacientes”. Precisa que el test podría no ser del todo efectivo, “pero que si puede detectar situaciones extremas”. Y es que Casanovas considera que “los jóvenes de hoy en día han tenido una educación amparada por sus padres y sin tener grandes dificultades, por lo que llevan muy mal la frustración”.

La UdL ha detectado que numerosos alumnos de esta carrera sufren ansiedad y depresión

Desde el Consejo del Estudiantado de Medicina no hay una posición sobre este test, pero su coordinadora, Alba Ávila, cree que “roza lo absurdo”. “A nivel personal, creo que tener más o menos estrés no quita que seas mejor o peor médico. Sí que hay gente que es más fría, pero en la carrera nos enseñan técnicas para soportar situaciones delicadas con pacientes”, afirma y asegura que “la empatía no se puede medir con un test. Además, los alumnos que lo tengan que hacer se lo pueden estudiar”. También denuncia que “según un artículo de Redacción Médica, este examen podría tener un precio de hasta 95,25 euros, teniendo en cuenta lo cara que ya es la carrera”.

Por otra parte, según la tesis doctoral ‘El médico residente como paciente’, elaborada por la doctora Candela Pérez en la Universidad de Zaragoza, el 7,5% de los Médicos Internos Residentes (MIR) sufren depresión. Esta tasa es cinco veces mayor que los jóvenes de su edad, ya que apenas el 1,5% la sufre.

La Organización Médica Colegial afirma que estos jóvenes se enfrentan a factores como la presión asistencial, el miedo a cometer un error, cambios drásticos al pasar de la universidad al ámbito laboral, falta de sueño, largas jornadas de trabajo, estigma de tener un problema de salud siendo médico o el fácil acceso a la medicación.