Pinchan las ruedas de decenas de coches en una noche en Lleida

Decenas de vehículos aparecieron ayer con las ruedas pinchadas en el barrio de la Mariola. Los hechos ocurrieron la madrugada de ayer, cuando una o varias personas causaron daños en vehículos estacionados en las calles Cardenal Cisneros y Mart, así como en la rambla de la Mercè. Una patrulla de la Guardia Urbana localizó los primeros coches con las ruedas pinchadas pocos minutos después doce de la noche, aunque un agente civil dio el aviso de otros vehículos afectados cerca de las 10.15 horas. De momento, la Policía Local tiene constancia de trece afectados, pero sospecha que pueda haber más. Según fuentes vecinales, podría haber hasta una cuarentena. En este sentido, los Mossos d’Esquadra animan a los propietarios a denunciar para poder abrir una investigación de los hechos y localizar a los autores. Se da la circunstancia de que hace unas semanas, el 28 de enero, varios vecinos ya denunciaron que algunos coches estacionados en Cardenal Cisneros amanecieron con la batería robada. Cabe destacar también que el año pasado se produjeron varios incendios de vehículos en la Mariola, todos ellos provocados. Entre estos últimos destacan tres coches que aparecieron calcinados el 1 de noviembre a la altura del número 131 del Passeig Onze de Setembre. También en aparcamientos de los Camps Elisis y la avenida del President Josep Tarradellas son habituales los daños en los coches para robar los objetos en su interior. Precisamente, la Guardia Urbana arrestó en noviembre del año pasado a dos hombres acusados de robar en cuatro coches estacionados en el entorno de los Camps Elisis. Al parecer, los dos arrestados acabaron peleándose después de forzar los turismos y uno de ellos acabó con la nariz rota.

En varias zonas de la ciudad en las que se ha registrado un aumento de robos y actos vandálicos los vecinos y usuarios de aparcamientos han exigido más medidas de seguridad. También se han registrado daños en parkings privados, donde los propietarios toman medidas y recomiendan a los vecinos no dejar la puerta de acceso abierta, además de asegurarse de que no hay nada de valor en el interior del turismo.