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La mayoría de los bares y restaurantes de Tàrrega cerraron antes de la suspensión oficial.

La mayoría de los bares y restaurantes de Tàrrega cerraron antes de la suspensión oficial.AMADO FORROLLA

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Los bares y restaurantes de toda la provincia echaron el cierre de forma mayoritaria ayer después de que el Gobierno central y la Generalitat anunciaran la suspensión de actividades del sector de la restauración y la hostelería. El ayuntamiento de Lleida informó que la Guardia Urbana ordenó ayer el cierre de 95 bares y restaurantes de la capital que permanecían abiertos, dándoles un plazo de 30 minutos para bajar la persiana. Pese a las advertencias, la policía local levantó un acta sancionadora a un local que no siguió las indicaciones. En otros negocios como las panaderías y reposterías la actividad siguió siendo la habitual, aunque tomando medidas preventivas y se registraron colas en supermercados y panaderías. “No descartamos cerrar, pero de momento mantenemos la distancia de seguridad”, dijo el responsable de una panadería de Cappont.

Por otro lado, los Mossos d’Esquadra decretaron el cierre la madrugada del viernes al sábado de 43 locales de ocio nocturno en toda la provincia, 32 de ellos en el llano de Lleida y 11 más en el Pirineo. En la capital, la mayoría de locales de ocio nocturno anunciaron el jueves que cesaban la actividad.

Los Mossos decretaron el cierre la madrugada del viernes al sábado de 43 locales de ocio

Entre los establecimientos cerrados, se incluyen bares especiales, bares de copas con o sin actuaciones musicales en directo, tabernas y bodegas, cafeterías, bares o café-bares, chocolaterías, heladerías, salones de té o croissanteries. También restaurantes, autoservicios de restauración, bares-restaurante, bares y restaurantes de hoteles, salones de banquetes y terrazas. También se añaden a esta lista las discotecas y salas de baile. No obstante los bares y restaurantes que ofrezcan comida a domicilio podrán seguir dando este servicio, así como los que vendan productos alimentarios. Así lo aseguraron los trabajadores de una tienda de bocadillos y embutidos de Lleida, que precisaron que “nuestras instrucciones son atender solo la venta de productos, nada de servir comida ni cafés, aunque desde la dirección no descartan cerrar totalmente por prevención”.

La mayoría de los bares y restaurantes de Tàrrega cerraron antes de la suspensión oficial.

La mayoría de los bares y restaurantes de Tàrrega cerraron antes de la suspensión oficial.AMADO FORROLLA

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