Un leridano no puede volver de Camboya por la pandemia

El leridano Miquel Monrabà viajó el 9 de marzo a Camboya por trabajo y ahora no encuentra la manera de volver a Catalunya. Monrabà explica que voló hasta la ciudad de Siem Reap para asistir a unas reuniones de trabajo importantes que no se cancelaron porque la situación en Camboya y Vietman estaba controlada, según las autoridades. En este sentido, explica que al llegar al país asiático había una "previsión espectacular", con termómetros y mascarillas en el aeropuerto, "totalmente los contrario de lo que vi cuando el día anterior salía de Barcelona", afirma. "A fecha de hoy, la situación continúa estabilizada en Camboya", añade.

El leridano denuncia que su aerolínea le canceló el día 15 el vuelo de vuelta a Catalunya, previsto para el 10 de abril, y critica que no ha recibido ninguna respuesta por parte de las autoridades españolas "aunque veo muchas noticias del Gobierno en apoyo a los ciudadanos españoles repartidos por el mundo".

Monrabà empezó a recibir mensajes alarmantes de la situación en España el 13 de marzo, "cuando en Camboya ya hacía dos semanas que habían obligado a cerrar las escuelas de las capitales, poner geles desinfectantes en todos los establecimientos y, sobre todo, prohibir todo tipo de aglomeraciones y reuniones numerosas". "La gente está muy concienciada, y todo con 3 casos, que hoy son 50 estabilizados desde hace 4 días. Hay un respeto increíble por la distancia, limpieza y sobre todo por tocar aquellas cosas que pueden ser transmisoras", añade.

Se ha puesto en contacto con la embajada de Singapur y Tailandia. "La de Singapur me comunicó que no podía salir de Camboya hasta pasados 14 días por seguridad y de la de Tailandia no he tenido respuesta", afirma. "Mi compañía el día 20 de marzo me respondió vía e-mail que tratarán de solucionar mi vuelo de vuelta, pero actualmente sigo en Camboya. En 14 días sólo podré transitar a Vietnam o Tailandia y siempre con vuelos internacionales que estén disponibles", lamenta.

"Hoy sigo en Camboya, conviviendo con la gente local y con mucha preocupación. Hay muchos pocos turistas, ningún español, y estoy a la espera de que mi gobierno me dé apoyo o al menos se comunique conmigo para tratar de ayudarme o informarme qué opciones tengo", concluye.