Un comerciante de Lleida: “Es un cierre sin precedentes, creo que ni en la guerra duró tanto”

“Estamos ante una tormenta perfecta que puede ser devastadora para el pequeño comercio”. Así de contundente se mostró ayer Montse Eritja, una comerciante que regenta la tienda Gessa en el Eix desde 1968, ya que la crisis del coronavirus y el cierre de todas las tiendas que no sean de alimentación puede poner en serios apuros el pequeño comercio. “En nuestro caso, el 40% de la facturación anual la hacemos en primavera y ahora no podemos vender, si a esto le añadimos que seguimos pagando tanto los impuestos como el alquiler, podríamos decir que el Covid-19 no podría haber llegado en peor momento”. Y es que ni los comercios más veteranos de esta arteria comercial de la capital recuerdan haber visto cerrados los establecimientos tanto tiempo. “Por lo que me explicaban en casa, en la Guerra Civil sí que hubo un tiempo que cerraban los comercios, pero no tanto como el que se prevé ahora”, señala Josep Maria Domingo, titular de la ferretería Domingo & Pont, que reconoce que “en 35 años de negocio no había visto una situación igual y tanto el pequeño comercio como los proveedores se resentirán”. Considera que esta crisis “marcará un antes y un después en el comercio, porque con el confinamiento mucha gente está comprando online y a ver cómo hacemos que vuelvan a la tienda física tras la cuarentena, esto cambiará por completo los hábitos”. En materia de impuestos, Domingo dice que “seguimos pagando, pero confío que en el alquiler del local podamos llegar a un acuerdo con el propietario”. Sobre este asunto, el presidente de los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API), Josep Maria Esteve, recordó que “no es obligatorio aplazar el pago del alquiler de locales y pisos, al menos hasta que el Gobierno lo decrete, pero sí ha habido casos de particulares que están ofreciéndolo dada la delicada situación que vivimos estos días”.

A su vez, el presidente del Eix, Llorenç González, dijo que el cierre prolongado de las tiendas “no tiene precedentes” y que “si no hay ayudas para el pequeño comercio, sufriremos mucho”. No obstante, cree que el sector “acabará recuperándose”, pero para ello “el Gobierno debería aplazar el pago del alquiler y servicios básicos”.