Urbanismo para el día después

Mantener la distancia con las otras personas será la clave del desconfinamiento cuando podamos salir de casa, según los expertos. Se marcan distancias en los puestos de trabajo y salas de espera, pero, ¿cómo se gestionará en las calles y los espacios abiertos? La arquitecta leridana Mamen Domingo ha propuesto un original método para mantener el distanciamiento social en la vía pública. “La idea es muy sencilla y consiste en pintar una serie de líneas o figuras en el suelo que estén a una distancia de dos metros entre ellas. De esta forma podemos controlar la distancia de seguridad sin hacer grandes obras”, asegura Domingo, que trabaja en el despacho de arquitectos Domingo-Ferré junto a Ernest Ferré, y que ha desarrollado la idea junto con la firma tecnológica Mortensen.

Para demostrar cómo sería este sistema en las ciudades, Domingo ha recreado escenarios icónicos en su página web postcovidcity.com, en la que se ven las calles de Barcelona con estos separadores en las aceras. También ha recreado cómo quedarían la plaza de Agelet y Garriga (la de la estatua de Indíbil i Mandoni) y la de la Paeria con este diseño. “Primero se podría poner en supermercados u hospitales y más tarde en calles, escuelas u otras zonas susceptibles de reunir a un gran número de personas”, opina Domingo, que recalca que la idea es totalmente gratuita y está al servicio de las entidades o ayuntamientos que lo necesiten. “Ya se han puesto en contacto con nosotros varios negocios e instituciones y lo ofrecemos gratis, consideramos que esto es la aportación que puede dar la arquitectura a esta crisis sanitaria”, asegura, a la vez que añade que “el urbanismo y las ciudades cambiarán radicalmente a raíz del coronavirus, se harán aceras más anchas y se priorizarán otros tipos de transporte al margen de los coches, como las bicicletas”.

“Lo único que nos garantiza seguridad frente al virus es mantener la distancia”, dice la autora del diseño

Una de las claves de este sistema es su bajo coste económico. “Solo se necesita pintura y un rodillo y se puede mover o retirar con facilidad, e incluso se podrían utilizar luces. En definitiva, lo considero un método democrático por su accesibilidad”, asegura Domingo, que en Lleida ha dejado su sello diseñando la plaza Blas Infante y la pasarela del Liceu Escolar. Considera que este sencillo método servirá para mitigar, en parte, lo que la pandemia ha provocado. “El coronavirus nos ha arrebatado a mucha gente y también libertad. y con este sistema podremos recuperar libertad y evitar que más gente se infecte, porque la única protección infalible contra el virus es la distancia, pero debemos salir a la calle sin miedo”.