A juicio un joven de 19 años de Lleida denunciado en varias ocasiones por saltarse el confinamiento

La Guardia Urbana de Lleida ha denunciado entre el viernes y domingo a 60 personas por saltarse el confinamiento decretado con el estado de alarma. El cuerpo abrió diligencias penales por desobediencia grave a una de ellas, en concreto a un joven de 19 años que fue sorprendido en la calle Mariola, ya que el chico había sido denunciado por el mismo motivo en diferentes ocasiones. Por otra parte, la Urbana detuvo la madrugada del sábado a dos vecinos de Lleida, de 21 y 25 años, por el intento de robo en un establecimiento comercial de la plaza Cervantes. Además, el segundo intentó agredir a los agentes con un cuchillo de 23 centímetros de hoja que llevaba escondido a la espalda, motivo por el cual también fue detenido como presunto autor de un delito de atentado en los agentes.

Otra de las personas denunciadas por incumplir las restricciones decretadas con el estado de alarma también fue detenida por conducir de forma temeraria, se negó a someterse a la prueba de alcoholemia y por resistencia y desobediencia a los agentes. Los hechos tuvieron lugar la madrugada del sábado cuando una patrulla quiso parar una furgoneta en el barrio de Magraners. El conductor hizo caso omiso a las indicaciones de los agentes para que se detuviera y continuó la marcha circulante temerariamente y a una velocidad excesiva. La Guardia Urbana localizó poco después el vehículo estacionado en la calle de L'Albi y al conductor cerca. El joven, de 18 años y vecino de la ciudad, se echó a correr al ver los urbanos pero lo interceptaron en la calle Florida. Según fuentes policiales, el chico ofreció resistencia a los agentes, uno de los cuales acabó lesionado. El joven, que según los policías presentaba síntomas de ir bebido, se negó a someterse a la prueba de alcoholemia.