El confinamiento acelera la apuesta de los restaurantes por la comida a domicilio

“Los clientes son los que nos animaron a dar el paso y por ahora nos está yendo muy bien”. Así describe Esther Alegre, responsable del restaurante Casa Tere de Lleida, cómo decidieron empezar a ofrecer comida a domicilio durante el confinamiento por la crisis del coronavirus. Una decisión que les ha servido para tener ingresos durante estas semanas de inactividad, así como también para afianzar clientela y encontrar de nueva. Tan bien les está yendo que incluso no descartan seguir ofreciendo este servicio una vez puedan volver a reabrir, ya que a partir del lunes se prevé que puedan atender en las terrazas pero solo con un 50% de aforo, convirtiendo así la entrega a domicilio en una parte más de su negocio de la restauración.

“Hace cuatro semanas que ofrecemos este servicio después de que nuestros clientes más habituales nos lo pidieran y las encargos no han hecho más que aumentar”, recalca Alegre. Su restaurante está especializado en carne y este está siendo precisamente su producto estrella. “Hemos reducido la carta y los platos que más demanda tienen son la espalda de cabrito, el ternasco y el entrecot”, pero Alegre señala que el plato estrella por encima de todos es la coca de recapte. “La hacemos el jueves y ese día solo entregamos este plato, además de algo de bodega, y el último jueves entregamos un centenar”, asegura. Poder seguir ofreciendo sus platos les ha servido para mantener su clientela habitual, que “es muy fiel y está muy agradecida, y además hemos captado a nuevos clientes, especialmente el fin de semana, cuando no les apetece cocinar”, asegura la responsable de Casa Tere. Añade que los domingos hacen una media de 50 repartos. La entrega de los platos lo hacen con un furgón especializado. “Lo cerramos todo herméticamente y antes de llegar al destino avisamos al cliente para que salga de casa a recoger los platos. Entonces se los damos, siempre ataviados con mascarilla, guantes y gel desinfectante y ofrecemos la posibilidad de pagar con tarjeta; aquí priorizamos la calidad de nuestros productos y la higiene”, concluye.

“Fueron los propios clientes los que nos animaron a dar el paso y nos va bien”, aseguran desde ‘Casa Tere’

Otro establecimiento que estas semanas ha apostado por la entrega a domicilio es La Dolceta. Su gerente, Eduard Trepat, indica que “llevamos desde el 20 de marzo e intentaremos seguir ofreciendo la entrega en casa después del confinamiento porque creemos que puede ser un complemento importante para el negocio”. Para ofrecer este servicio “hemos reincorporado a todo el personal de cocina, ya que a toda la plantilla le habíamos aplicado un ERTE, y la iniciativa ha tenido muy buena acogida, hacemos una veintena de entregas diarias y los fines de semana la cifra sube hasta las sesenta”, asegura Trepat. Para entregar los platos utilizan el mismo método que Casa Tere. “Avisamos al cliente que baje a la calle a por la comida y listos, y solo aceptamos pagos con tarjeta por seguridad”, recalca. Lo más demandado son las carnes a la brasa, caracoles a la llauna, alcachofas “y al principio también ofrecíamos calçots, pero ahora ya se ha acabado la temporada, hemos reducido la carta pero ofreciendo nuestras especialidades y nos está sorprendiendo mucho la demanda que estamos teniendo”, dice el gerente. Este es, precisamente, uno de los principales motivos por los que Trepat se ha decantado por mantener la entrega a domicilio. “Además que nos ha servido para entretenernos estos días y generar algún ingreso, hemos captado nuevos clientes y eso es positivo y lo necesitaremos cuando reabramos”, subraya Trepat.

“Solo el 25% de los locales abrirán las terrazas si no dejan ampliarlas”

El secretario general de la Federación de Hostelería, Ramon Solsona, advirtió de que según una encuesta entre sus asociados, “solo el 25% de ellos abrirá sus terrazas si no dejan que puedan ampliarlas”. La fase 1 de la desescalada permite que los bares y restaurantes puedan abrir sus terrazas con el 50% de su aforo, por lo que la Federación ha pedido a la Paeria la posibilidad de que los establecimientos amplíen su superficie actual. “Nuestros asociados consideran que esta ampliación es clave”, recalca Solsona, que se reunirá los próximos días con la Paeria para tratar este asunto. “Se les ve concienciados ante este problema y confío en que podamos solucionarlo”, añadió.