Críticas en la vuelta a los juzgados del 30% del personal

Los juzgados recuperan poco a poco la normalidad con el regreso del 30% de la plantilla, que ayer recuperó las tareas de forma presencial después de que durante el confinamiento el teletrabajo no haya sido posible por falta de medios. El sindicato Staj denunció ayer que el regreso se ha hecho sin las medidas de seguridad necesarias, por lo que reclamó material de protección para todo el personal, al no poder cumplir con la distancia social. “Si estamos sentados no hay problema, pero en cuanto nos movemos no podemos cumplir los dos metros de distancia que establece el protocolo sanitario. Nos sentimos desprotegidos y para actuaciones que no son esenciales”, señalaron fuentes sindicales. En este sentido, señalaron que ayer se reanudaron las entregas de notificaciones judiciales a domicilio. “Siete funcionarios van a casas particulares, poniéndose en riesgo, para entregar notificaciones cuando los plazos están suspendidos. Es una situación esperpéntica”, denunció. Por ello, solicitó más medidas como la instalación de mamparas en las oficinas del personal judicial, no solo en atención al público, donde ya se han instalado. Fuentes del departamento de Justicia señalaron que se entrega a los funcionarios una mascarilla quirúrgica al día y dos mascarillas de ropa y que se estudia la posibilidad de instalar mamparas en las oficinas y en las salas de vistas para recuperar los juicios presenciales. Se han reanudado las obras de mejora, como en los servicios territoriales de Justicia, donde se invertirá más de medio millón de euros, y en el Canyeret, para modernizar el centro de transformación eléctrica. También se reanudarán las reformas en los juzgados de Tremp, que iban a empezar cuando se estableció el confinamiento.

Mejoras en los sistemas de seguridad de la cárcel de Lleida El departamento de Justicia ha reiniciado también las obras en prisiones que habían quedado paralizadas por la crisis sanitaria con la aplicación de los protocolos para garantizar la seguridad de los profesionales de la construcción que trabajan en los diferentes equipamientos. En Lleida, además de reiniciarse las obras en la sede de Justicia y en el Canyeret (donde la conselleria continúa con las obras de reparación de los ascensores que sufrieron una avería a principios de este año), en la cárcel de Ponent hay trabajos en marcha para modernizar los sistemas de seguridad de todo el equipamiento. La conselleria destaca que se sustituirán los grupos electrógenos de emergencia, las alarmas antiincendios, el sistema de interfonos y las puertas de las celdas. También se modernizará el sistema de videovigilancia en la prisión leridana, así como en el Centre Educativo El Segre para menores. El departamento señala que estas actuaciones, consideraradas de emergencia, no se han suspendido durante el confinamiento. En total, Justicia tiene actuaciones en marcha que suman más de 20 millones de euros en sedes judiciales y prisiones de Catalunya. Destaca la inversión de 9 millones en Quatre Camins y la construcción del Centre Obert de Tarragona, con 9,5 millones.