TRIBUNALES SENTENCIA
Cárcel para una pareja que estafó 1,2 millones simulando accidentes
La Audiencia condena a 7 años y 9 meses de prisión al hombre y a 6 años y medio a la mujer || Deberán retornar el dinero a la Seguridad Social y a cuatro aseguradoras
La Audiencia de Lleida ha condenado por estafa agravada a un matrimonio leridano por simular dos accidentes de tráfico para cobrar indemnizaciones de cuatro aseguradoras y de la Seguridad Social en un fraude, que ascendió a 1,2 millones de euros, que es la cantidad que deberán devolver. Concretamente, el tribunal ha condenado a J.R.B, exsargento de los Bomberos, a siete años y nueve meses de prisión y a E.R.D, exauxiliar de enfermería, a seis años y medio de cárcel. La sentencia, de 60 páginas, llega tres meses después de la celebración de un juicio que se prolongó durante cinco días. El tercer acusado, un conductor que confesó que percibió 600 euros para colisionar contra el coche la mujer, ha sido condenado a diez meses de prisión.
El tribunal ha considerado probado, como sostenían la Fiscalía y las aseguradoras, que el matrimonio organizó sendos accidentes para así poder cobrar cuantiosas indemnizaciones de los seguros y de la Seguridad Social. Los siniestros tuvieron lugar en 2010 en La Caparrella, en el que el acusado estuvo implicado, y en 2015 en la N-II entre Fraga y Seròs, con la acusada implicada. La principal prueba que había y que contra la pareja y que ha resultado ser clave es la declaración de los otros dos conductores. Un camionero declaró en el juicio que el exsargento de Bomberos le pagó 2.000 euros para que chocara contra su vehículo. El otro conductor afirmó que percibió 600 euros para colisionar contra el coche la acusada. Los Mossos d’Esquadra afirmaron que ambos accidentes fueron un montaje. El hombre ha sido condenado de dos delitos continuados de estafa y un delito contra la Seguridad Social, y la mujer, por un delito continuado de estafa y un delito contra la Seguridad Social porque consiguió la invalidez a raíz del supuesto fraude. La sentencia no es firme y puede ser recurrida ante el TSJC.