El pabellón de la Fira para temporeros y 'sin techo' abre con 150 plazas y el rechazo vecinal

El ayuntamiento abrió ayer el pabellón 3 de la Fira de Lleida en los Camps Elisis como oficina de atención para temporeros sin alojamiento y personas ‘sin techo’ que buscan trabajo. Funcionará hasta el 13 de septiembre y ofrecerá alojamiento, comida, consigna, duchas y asesoramiento laboral a todo a aquel que venga a la campaña de la fruta, tenga trabajo o no. La ubicación de este servicio en este pabellón, que ya se utilizó hace dos años para el mismo fin por el anterior equipo de gobierno, genera el rechazo de la asociación de vecinos de Cappont, al entender que el lugar “no es el adecuado” y que ha sido una “imposición” de la Paeria.

El pabellón tiene capacidad para 150 personas. Cada una podrá pernoctar 7 días seguidos y otros tres de forma intermitente, según la coordinadora de de Servicios Sociales, Gemma Domingo. Recordó que “este es un alojamiento de emergencia”y que las 68 personas sin techo que hasta ahora dormían en el pabellón Agnès Gregori, serán trasladadas a la Fira. El concejal de l’Horta, Joan Ramón Castro, indicó que desde hoy [por ayer] los productores de fruta del municipio deberán rellenar un formulario en la web de la Paeria para que conste cuántos empleados han contratado para la campaña de la fruta y dónde están alojados. Por otro lado, Sandra Castro, edil de Educación y que durante el estado de alarma se encarga de Servicios Sociales, dijo que el pabellón 3 de la Fira “es el espacio que nos permitía acoger a más gente”.

La plataforma Fruita Amb Justícia Social denunció que la Paeria ha privatizado este servicio adjudicándolo “sin concurso público” a la Orden Hospitalaria Sant Joan de Déu. Castro lo negó de plano. “No se ha privatizado, los costes los asume la Paeria y tenemos a 20 personas trabajando, de las cuales solo 2 y otra a media jornada son de la entidad que nombran”. El presupuesto del dispositivo asciende a 295.000 euros, 70.000 de los cuales los aporta la Diputación.

Por su parte, la presidenta vecinal de Cappont, Veni Ros, criticó la ubicación de la oficina. “Nos enteramos por la prensa y el año pasado ya dijimos que los Camps Elisis no eran un lugar adecuado y propusimos que habilitaran el antiguo convento de las Josefinas, que es de la Paeria”, dijo Ros. “No se nos ha escuchado y es una imposición que vengan a los Camps Elisis”, añadió. El concejal del barrio, Ignasi Amor, lamentó sus declaraciones. “Fue de las primeras personas a las que avisamos del dispositivo, y pese a entender las quejas debemos ser solidarios”. Por otro lado, ayer el alcalde, Miquel Pueyo, valoró la labor de Arrels y Cáritas en la atención a los temporeros.

El Barri Antic llevará ante el juez la gestión de Paeria y Govern

Representantes vecinales del Centro Histórico de la entidad Som Veïns y la Plataforma del Pla de l’Aigüa, a la espera de que puedan unirse la asociación de Jaume I, la de comerciantes y la de la plaza l’Ereta, acordaron ayer denunciar ante los tribunales a la Paeria y al Govern de la Generalitat “por haber incumplido las medidas del BOE para evitar el contagio de la Covid en el barrio, permitiendo la convivencia y pernoctación de hasta 200 personas en las calles poniendo en situación de riesgo a los vecinos”.

El portavoz de la Plataforma del Pla de l’Aigua, Josep Maria Muñoz, explicó que “estamos hartos de tantos años siendo invisibles para la Paeria frente a la delincuencia, tráfico de drogas, prostitución e incivismo, situación que ahora se ha agravado con el coronavirus”. Muñoz dijo que muchos vecinos tienen miedo de salir a la calle “por si hay personas portadoras del virus” y denunció que “ayer había colas de gente entre las calles Tallada y Panera porque la Paeria ha habilitado dos puntos de recogida de comida, sumando más servicios al barrio”. Los participantes en la reunión convocaron una concentración el viernes en Rambla d’Aragó, en su confluencia con la plaza Cervantes y Balmes, “para mostrar nuestra indignación”. La entidad de Jaume I también participará en esta acción.