ESNOTICIA
El Arnau tendrá 15 camas para críticos en reserva por si hay rebrote de Covid
La pandemia del coronavirus obligó a todos los hospitales a aumentar sus camas de UCI debido a la gran presión asistencial. En Lleida, el Arnau adaptó para ello el espacio de los quirófanos. Ahora y en previsión de un posible rebrote en otoño, pasará de tener 30 camas para críticos a 45, y las quince nuevas serán de reserva.
Imagen de archivo de profesionales del equipo de la Unidad de Cuidados Intensivos.
El hospital Arnau de Vilanova contará con 15 camas más para críticos en la sexta planta que servirán como “reserva” en caso de que vuelva a desbordarse la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), ya sea por un rebrote en otoño de la Covid-19 o por cualquier otra emergencia sanitaria. El hospital tiene 22 boxes en su UCI convencional y ocho en la Unidad Coronaria (UCI para patologías cardiológicas) en esta misma planta. A finales de marzo y principios de abril, en pleno pico de la pandemia tuvo que readaptar la zona quirúrgica y de reanimación para habilitar más camas para enfermos críticos. El centró llegó a tener entonces a 43 pacientes de Covid-19 en la UCI. Ahora, ampliará su capacidad inicial de 30 a 45 camas.
Estas 15 camas de reserva se habilitarán dentro del proyecto de modernización y renovación de todas las plantas del hospital, que financiará la Diputación, pendiente desde hace años.
El gerente del Institut Català de la Salut (ICS) en Lleida, Ramon Sentís, explicó que está previsto que los trabajos arranquen a principios de julio. “Empezaremos con la sexta planta sur, la que da a la ciudad, y servirá tanto para hospitalización convencional, con dos camas en cada una de las 15 habitaciones, o para que en caso de necesitar más camas para críticos por si hay un rebrote de coronavirus, puedan convertirse en habitaciones individuales con todo el material necesario que requiere una UCI”, explicó y añadió que también se podrá atender a semicríticos, como afectados por ictus. Esta ampliación se enmarca en la voluntad de Salud de aumentan entre un 20% y un 25% las camas de críticos en Catalunya.
Por otra parte, el investigador Oriol Mitjà afirmó ayer en RAC1 que la situación es “bastante estable”, pero alertó de que es evidente que habrá una segunda ola en otoño y que si no se hace nada esta será “mucho más grave”. “Hemos experimentado solo una pequeña fracción de lo que el virus puede hacer”, dijo. Añadió que ha “retrocedido” por factores climáticos y las medidas adoptadas.
