El Síndic constata que los centros públicos y concertados necesitan 1.163 millones extra

Un informe del Síndic de Greuges de Catalunya, Rafel Ribó, calcula que el sistema educativo requiere una aportación pública extra de 1.163 millones respecto al de 2019 para garantizar una financiación de los centros públicos y concertados con equidad y sin segregación. El informe calcula el coste teórico medio de las plazas escolares, que fija en 4.973 euros en Infantil y Primaria (5.117 en la pública y 4.659 en la concertada) y en 6.100 en Secundaria (6.579 y 5.211, respectivamente). Así, determina que el coste es superior en la pública que en la concertada, pero el gasto real es superior en la privada por las aportaciones de las familias para actividades y servicios complementarios. De media, las familias aportan unos 1.800 euros por alumno y curso, 855 en la pública y 3.900 en la aconcertada.

El impacto presupuestario de los 1.163,8 millones extra para cubrir el coste teórico de las plazas educativas supondría un aumento de alrededor del 20% del presupuesto del año pasado, pese a que este 2020 la aportación adicional la aportación sería inferior porque Educación ya dispone de unos 6.700 millones de presupuesto. De este incremento, 581,2 millones serían para el sector público y 582,6 para el concertado. Como los centros concertados son un tercio del total, la cantidad para cada uno sería superior a la de los públicos, ya que actualmente la infrafinanicación y las aportaciones de las familias en la concertada son superiores.

Padres ven una falta de presupuesto “evidente” y CCOO quiere priorizar centros vulnerables

Asimismo, el Síndic de Greufes reiteró que la no presencialidad en las aulas y centros educativos en el marco de la pandemia de coronavirus es un factor que puede incrementar la desigualdad educativa y la segregación escolar.

El presidente de la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Escuelas Libres de Catalunya (Fapel), Josep Manuel Prats, lamentó el “infrafinanciamiento evidente” del sistema educataivo, que aseguró que afecta a los sueldos de los docentes y determina la elección del centro. Pese a tildar de insuficiente la cifra erclamada por el Síndica, dijo que Educación ya “no tiene excusa” para no impulsar políticas contra la segregación y la desigualdad educativa.

Por su parte, CCOO recalcó que el financiamiento público debe incrementarse “extraordinariamente”, apostó por priorizar los centros que escolarizan a alumnado vulnerable y, en el caso de los concertados, instó a implementar contratos programa.

Bargalló aboga por un modelo de financiamiento “asimétrico” El conseller de Educación, Josep Bargalló, abogó por un modelo de financiamiento “asimétrico” y basado en contratos programa para centros públicos y concertados. “Es necesario mejorar el financiamiento de todas las escuelas, públicas y concertadas, pero no hace falta hacerlo de manera simétrica, porque no todas las escuelas tienen las mismas necesidades”, dijo. Aseguró que, pese a que la liquidación del presupuesto para 2020 será de 1.000 millones, aún no se habrá “luchado contra la segregación escolar”, por lo que defendió un aumento constante, progresivo y consolidado para impulsar políticas contra esa práctica. Recordó que para el curso 2020-2021 han preparado un plan de choque dotado con 33 millones para hacer frente especialmente a los centros de máxima complejidad.Señaló que no están “a tiempo” para el incremento adicional de 1.163,8 millones reclamados por el Síndic.