Cerca de un millar de conductores condenados en un año en Lleida

Los delitos contra la seguridad vial continuaron al alza el año pasado. Así se refleja en la última memoria de la Fiscalía,sobre la actividad judicial correspondiente al ejercicio de 2019, y que indica que en las comarcas de Ponent las condenas contra conductores ya rozan el millar en solo doce meses. Según estos datos, en 2019 se dictaron un total de 962 sentencias por delitos de tráfico, la infracción penal por la que se imponen más sentencias en la provincia de Lleida y que presentan el 36% del total de fallos judiciales dictados durante el año pasado. Asimismo, en 2019 los juzgados impusieron un 4,5% más de condenas por delitos contra la seguridad vial respecto a 2018 y un aumento de casi el 30% en los dos últimos años. Además de los chóferes leridanos que fueron condenados, a otros 398 se les abrieron diligencias penales y están a la espera de juicio.

El consumo de alcohol y drogas al volante sigue siendo la principal causa de condena, representando más de la mitad de las mismas, con un aumento del 7,7% respecto a 2018. Según la Memoria de la Fiscalía, le sigue el delito de ir al volante sin tener el carnet en vigor, ya sea por la pérdida de todos los puntos, por retirada judicial al ser reincidente o porque nunca lo han obtenido. En 2019, los tribunales de la provincia dictaron un total de 340 condenadas por circular sin licencia, cuatro menos que el año anterior. La estadística sí muestra un ligero repunte de los conductores sancionados penalmente por conducción temeraria, con 25 condenas el año pasado así como por negarse a someterse a las pruebas de alcohol o drogas, con 54. También hubo más chóferes leridanos sentenciados por exceder los límites de velocidad, con 22 sentencias y otros cuatro acabaron cumpliendo algún tipo de pena por conducir cometiendo imprudencias que ponen en riesgo a terceros. En 2019 solo se decretaron medidas de prisión para 9 conductores; tres por conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas; otros tres por conducción temeraria y tres más, por circular sin carnet.

Los jueces dictaron el ingreso en prisión preventivo para nueve conductores en 2019

Los Mossos denunciaron penalmente en 2019 a un total de 785 conductores en Ponent y el Pirineo

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Los Mossos d’Esquadra denunciaron penalmente el año pasado a siete conductores en las comarcas leridanas por abandonar el lugar de un accidente. Se trata de las primeras imputaciones por esta conducta en la carretera que castiga con prisión que un conductor se vaya del lugar de un siniestro. Una reforma promovida por la vecina de La Seu d’Ugell Anna González, que luchó durante años para reformar la ley después de que su marido muriera atropellado por un camionero y este se diera a la fuga. Según la reforma, el abandono del lugar del accidente se castiga con penas de entre seis meses y cuatro años de prisión y la retirada del carnet de conducir entre uno y cuatro años. Hasta ahora, el Código Penal solo contemplaba como delito la omisión del deber de socorro, pero era muy difícil poder imputar este tipo de delito a los conductores que abandonaban el lugar del accidente.

En total, los chóferes imputados por delitos de tráfico volvieron a aumentar y en 2019 los Mossos llevaron a los tribunales a un total de 785 conductores en la provincia de Lleida. Esto supone un aumento del 4% respecto a 2018. Por tipo de delito, la Policía catalana imputó a 347 conductores por circular bajo el consumo de alcohol o drogas, lo que supone el 44,2% del total de chóferes imputados. Destaca un aumento muy significativo de los chóferes denunciados penalmente por exceso de velocidad, con 22 en 2019 frente a los diez de un año antes. Mientras, circular sin carnet es el segundo delito con más imputaciones en la provincia, con 248 investigados en solo un año. Otros 24 conductores fueron denunciados por homicidio y lesiones imprudentes y otros 39, por conducción temeraria.