El TSJC rechaza la petición de los bares de consumir dentro de locales

La sala de vacaciones del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) desestimó ayer la medida cautelarísima solicitada por la Federación de Hostelería de Lleida en contra de la restricción de la Generalitat para frenar los contagios de Covid-19 que prohíbe atender en el interior a los bares y restaurantes de Lleida ciudad, Alcarràs, Soses, Seròs, Aitona, Torres de Segre y La Granja d’Escarp y solo permite consumir en terrazas, al 50% de su aforo. El tribunal desentimo la medida al ponderar las razones sanitarias. La federación presentó un contencioso administrativo ante el TSJC contra las resoluciones del Govern de los días 30 y 31 de julio en las que se prohíbe en consumo en el interior de los locales de las siete poblaciones y pidió la adopción de medidas cuatelarísimas mientras no se pronuncie sobre el recurso. Las medidas fueron ratificadas el miércoles por el Procicat.

El secretario general de la Federación de Hostelería de Lleida, Ramon Solsona, dijo que tenían la “esperanza” de que el tribunal aceptara la reapertura del interior de los locales como medida cautelar. Consideró una “barbaridad” tener que seguir sin poder servir en el interior. Asimismo, cifró en seis millones al mes el gasto de los 1.200 establecimientos hosteleros de Lleida y los seis municipios del Baix Segre entre el pago del 65% de los expedientes temporales de regulación de empleo, el 50% de la cuota de autónomos y otras cuestiones como el alquiler o los suministros básicos. “Es de locos. Y van alargando las medidas, como si no pasara nada. ¿Cómo lo hemos de hacer para pagarlo todo?”, subrayó. Asimismo, la plataforma NUC dijo que “vamos a denunciar a los responsables para reclamar danos patrimoniales”.

Hostelería dijo que tenían “esperanza” en que prosperara el recurso y afirma que están en la ruina

El alcalde accidental, Toni Postius, afirmó que ayer transmitió al presidente de la Generalitat, Quim Torra, que “no estamos nada de acuerdo con la decisión del Procicat porque entendemos que la evolucióon de los datos epidemiológicos en Lleida están siendo muy faborables”. Destacó que en los CAP de la capital se llegó a aumentos de positivos del 70% mientras que ahora “estamos en bajadas del 40% y planteó a Torra un “punto medio” en las medidas restrictivas. Así, propuso que los locales hosteleros puedan servir en el interior al 25% o 50% de su aforo, o bien que se pueda consumir dentro al mediodía, cuando las temperaturas son más altas, o que puedan utilizar el interior los bares que no tienen terraza. Advirtió de que “el 30% de los negocios no volverán a abrir”, situación que tildó que “calamidad”. En otro orden, Postius pidió a la Generalitat y al Estado que se “habiliten mecanismos para los municipios que no tienen remanentes de tesorería, pero tenemos los mismos gastos o más”.

El jefe de la oposición, Fèlix Larrosa, lamentó la “falta de capacidad de influencia de la Paeria” y calificó de “injusta” e “indiscriminatoria” la decisión del Procicat. También denunció falta de transperencia de la Generalitat. Afirmó que las restricciones en los locales provocan una “ruina tanto para la ciudad como para el territorio” y pidió al Govern que concrete “públicamente la cifra de pérdidas económicas en la ciudad a causa del segundo confinamiento injusto y poco explicado por Salud”.